Mas oculta el retrato del Rey

Desde que Artur Mas puso rumbo al Estado propio, el líder de CiU ha medido al milímetro la escenografía de sus actos. Ha sido especialmente cuidadoso a la hora de comparecer junto a dos banderas (la catalana y la europea), cuando antes lo hacía simplemente con la «senyera». Ayer, en su toma de posesión como president, dio un paso más para alejarse de los símbolos españoles. Lo hizo mandando ocultar el retrato del Rey que preside el Saló Sant Jordi del Palau de la Generalitat, donde se celebró el solemne acto. Los servicios de protocolo colocaron una extensa cortina negra para tapar una buena parte de la pared donde está colgada la pintura de Don Juan Carlos, pero quisieron restar polémica al asunto asegurando que ya se había hecho esta misma práctica en otras ocasiones.