Doce minutos en el aire

¿Prohibir vuelos cortos? Esto es lo que contaminó usar el Falcon para recoger a Sánchez en Santiago de Compostela

La decisión resultó en un vuelo de doce minutos para recorrer los cuarenta que separan A Coruña de la capital gallega por carretera

El PP reclamará información oficial en el Congreso y el Senado sobre el "uso partidista" del Falcon por parte de Sánchez
El PP reclamará información oficial en el Congreso y el Senado sobre el "uso partidista" del Falcon por parte de SánchezEuropa Press

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a estar en el ojo de la tormenta tras protagonizar un nuevo episodio con el Falcon. En esta ocasión, el líder socialista, reelegido el pasado noviembre, tomó la decisión logística de hacer volar el avión oficial para un trayecto excesivamente corto entre A Coruña y Santiago de Compostela.

El motivo oficial del desplazamiento era la visita al astillero ferrolano de Navantia, aunque en su visita aprovechó para participar en la Convención Política del Partido Socialista de los socialistas gallegos. Después de aterrizar en A Coruña y trasladarse a Ferrol y Santiago para cumplir con su agenda, la Moncloa optó por movilizar el Falcon (desde por la mañana aparcado en A Coruña) para recoger al líder socialista en la capital gallega. En lugar de recorrer por carretera los aproximadamente 70 kilómetros que separan ambas ciudades en 40 minutos, o decantarse por el tren durante veinte minutos, la decisión resultó en un vuelo de apenas 12 minutos.

Las emisiones de CO2 generadas en esos 12' equivalen a las producidas por 62 viajes en coche en ese mismo trayecto. Una elección que no habrá pasado desapercibida para su vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, fiel defensora de la prohibición de los vuelos cortos para mitigar la huella de carbono en España. El portavoz de Sumar, Gerardo Pisarello, argumentó entonces que la utilización del avión oficial por parte del presidente del Gobierno o Díaz, se respaldaba en su posición "institucional", aunque defendió su uso en situaciones "excepcionales".

La excepción del trayecto, que implicó volar durante 112 minutos (Madrid-Coruña, Coruña-Santiago, Santiago-Madrid), emitió aproximadamente cuatro toneladas de CO2, equivalente al consumo de un coche en 26.000 kilómetros.

Los populares, una vez más, han acusado a Sánchez de hacer un uso "inadmisible" del Falcón. Explican que, para que el presidente del Gobierno haya cumplido con su ejercicio de "soberbia" en el aire, los españoles hemos tenido que pagar un traslado "equivalente a un Madrid-Navacerrada, menor a un Valencia-Benicassim, similar a un Málaga-Marbella e inferior a un Barcelona-Salou".