La izquierda

Sumar aglutina ya al «primer» Podemos

Hasta 40 excargos del partido original han mostrado su sintonía y han abandonado a Montero y Belarra. Pablo Bustinduy, ex diputado morado, pilotará el equipo de campaña de la vicepresidenta

La izquierda tiene cuatro días para negociar una candidatura de unidad. A día de hoy, los partidos implicados como Podemos, Más Madrid o Compromís reconocen que «todavía queda mucho que hablar» y ninguna fuerza se atreve a dar la «fumata blanca».

Entre medias de este proceso de negociación, Sumar va dando pasos con los que va armando su proyecto político. Ayer, fuentes de Sumar confirmaban el fichaje del exdirigente de Podemos Pablo Bustinduy, para pilotar el equipo de la campaña electoral de cara a las elecciones generales. Un anuncio que dejaba mudo al partido morado que desconocía el movimiento. Bustinduy fue diputado por Podemos y coordinador de la Secretaría Internacional del partido. En 2019 renunció a ir en las listas del partido en Europa y fue abandonando sus responsabilidades políticas vinculadas con Podemos.

Con su anexión al equipo de Sumar, la vicepresidenta va aglutinando ya a una buena parte de lo que se llama el «primer Podemos», los dirigentes que en su día acompañaron a Pablo Iglesias en sus primeras Ejecutivas hasta Vistalegre 2. Del primer Consejo Ciudadano Estatal, de 62 cargos elegidos, hasta 23 están totalmente desvinculados de Podemos y, o bien, algunos trabajan ya con Sumar, han mostrado su sintonía con el proyecto o se han pasado a Más Madrid, partido alineado con Díaz.

Otras 17 figuras destacadas salen del segundo Consejo Ciudadano Estatal de Podemos y hoy han expresado su voto a favor para construir una candidatura de unidad. Aparte de Pablo Bustinduy, Íñigo Errejón, Rita Maestre, Miguel Ardanuy y Eduardo Fernández formaron parte de esa primera dirección de Podemos y ahora están en Más Madrid y han confirmado su apoyo a Díaz. Sara Bienzobas, por ejemplo, colabora con la vicepresidenta en el Ministerio de Trabajo. Otros perfiles referentes entonces como la eurodiputada Tania González Peñas, Jorge Uxo o Jorge Lago, presidente de la primera Fundación 25M, Miguel Vila o Ariel Jérez, apoyaron a la vicepresidenta en la presentación de su candidatura. También otros dirigentes relevantes como Nagua Alba (exlíder de Podemos en País Vasco) o Esperanza Gómez (Más País) o Pedro de Palacio -muy cercano al errejonismo– trabajan con Díaz. La vicepresidenta tercera del Congreso, Gloria Elizo formaba parte del Comité de Garantías de Podemos desde sus inicios, hoy está totalmente distanciada de los morados y se encuentra alineada con Díaz. El diputado de Podemos Txema Guijarro forma parte del núcleo de confianza de la líder de Sumar. También el líder de los comunes en Madrid, Jaume Asens, que mantiene su cargo en el Consejo Ciudadano de Podemos. Lo mismo ocurre con Jessica Albiach, que es la coordinadora de En Comú Podem. Juan Pedro Yllanes, vicepresidente balear o Sergio Pascual –primer secretario de Organización del partido– dejan claro en entrevistas su posición. En redes también han apoyado a Sumar otros ex-Podemos como Belén Guerra, Ángela Ballester o Raimundo Viejo.

A nivel territorial, la vicepresidenta cuenta con gran poder de convocatoria de excargos morados. El ex secretario general de Podemos en el País Vasco, Lander Martínez forma parte del equipo asesor en el Ministerio de Trabajo. El líder de Podemos en Asturias, Daniel Ripa, también defiende a Díaz, al igual que su homólogo en Aragón, Nacho Escartín, en Madrid, Ramón Espinar o en Galicia Antón Gómez Reino. Hay también cargos actuales de Podemos que también apoyan a Díaz, como Pilar Garrido –coordinadora de Podemos País Vasco– ;Irene de Miguel –Extremadura–; Begoña Alfaro –Navarra–; Covadonga Tomé –Asturias–; Borja San Ramón–Galicia–, entre otros.

Algunos de estos dirigentes se encuentran trabajando activamente para favorecer un acuerdo de unidad entre Podemos y Díaz. De momento, las conversaciones entre ambas partes continúan en silencio. En el partido morado lamentan que el proceso va «muy lento» y se marcan el día de mañana como fecha para tomar una decisión. Y es que los morados tienen que hacer –por estatutos– una consulta exprés a la militancia para ratificar su decisión final de aliarse con Díaz para el 23-J o de concurrir por separado.