Barbate

La urgente necesidad de configurar como delito el "petaqueo"

El suministro de gasolina a las narcolanchas, que permanecen la mayor parte del tiempo en alta mar, sólo está castigado como infracción administrativa

La narcolancha que partió en dos la zódiac en la que iban los dos agentes que han muerto en Barbate, Cádiz, ya se encuentra en el depósito del puerto de Algeciras, custodiada por la Guardia Civil.
La narcolancha que partió en dos la zódiac en la que iban los dos agentes que han muerto en Barbate, Cádiz, ya se encuentra en el depósito del puerto de Algeciras, custodiada por la Guardia Civil.La Sexta

Algunos de los que se dedicaban al narco en el sur de España se han pasado al “petaqueo”: Obtienen unas ganancias similares y sus acciones delictivas no pasan de simples infracciones penales, sin mayores consecuencias. Expertos policiales antinarcóticos, consultados por LA RAZÓN, han subrayado la urgencia de que se legisle de manera urgente sobre este asunto, como ser hizo en 2018, cuando el Gobierno aprobó el Real Decreto Ley 16/2018, de 26 de octubre, para prohibir las narcolanachas.

Desde entonces, estas embarcaciones, que se fabrican sobre todo en Portugal, se mantienen la mayor parte del tiempo en alta mar y sólo se acercan, el menor tiempo posible, a la costa para descargar la droga, para inmediatamente huir. Los potentes motores que llevan, entre los 250 y los 450 cv de potencia cada uno, con un consumo medio de entre 50 y 60 litros de combustible a la hora, necesitan de repostaje cada cierto tiempo y ahí es donde se incardina la labor de los “petaqueros”, que con pequeñas embarcaciones recreativas o botes llevan hasta las narcolanchas los bidones de gasolina necesarios para poder proseguir sus actuaciones delictivas.

Procuran, en todo momento, que las cantidades no alcancen las estipuladas en la legislación vigente, por lo que, de ser sorprendidos por las Fuerzas de Seguridad, el asunto se solventa como una infracción administrativa. “No estará de más que el Gobierno, en alguno de esos decretos omnibus que dicta, introdujera un precepto que configure esta actividad como delito; se habría avanzado mucho en la lucha contra el narco”, señala un experto.

El “petaqueo”, mientras no se modifique la legislación vigente, es un negocio redondo. Las embarcaciones de suministro suelen permanecer escondidas en naves o parajes de difícil acceso; o, directamente, en los puertos. Las cargan de petacas de gasolina, de comida, de ropa o incluso las utilizan para hacer el relevo de los que están en alta mar.

El negocio suele estar protagonizado por gente joven, pero, conforme pasa el tiempo, se han formalizado organizaciones conexas con el narco que logran grandes beneficios con un mínimo riesgo. Sólo conlleva una sanción administrativa que en el caso de los menores asciende a cien euros y suelen ser los padres quienes tienen que responder. Las organizaciones criminales pagan hasta 400 euros por cada petaca de gasolina. Lo que transportan en cada viaje tendría que superar los 50.000 euros para que constituyera delito, por lo que todo se queda en in infracción administrativa.

La normativa que se estableció en 2018 para las narcolanchas especificaba que si tenían más de 8 metros de eslora o 201 caballos de potencia podían ser decomisadas directamente por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, al igual que si el valor superaba los 50.000 euros. De ahí que permanezcan en alta mar, fuera de las aguas jurisdiccionales, la mayor parte del tiempo. Si se le legisla adecuadamente contra el “petaqueo”· se habrá dado un paso importante en la lucha contra el narcotráfico.