Turismo
Así es el ayuntamiento con menos habitantes de Galicia
Marcado por el río Navia y el embalse de Salime, este pequeño municipio conserva su esencia rural entre montañas
Rodeado de montañas, bañado por las aguas del río Navia y con una historia marcada por la resistencia y el aislamiento, Negueira de Muñiz es el municipio menos poblado de Galicia. Con apenas 240 habitantes según las estadísticas del INE para el 2024, esta localidad lucense se ha convertido en un refugio de tranquilidad, historia y naturaleza.
Negueira de Muñiz es uno de esos lugares donde la historia se palpa en cada piedra y en cada sendero. Su nombre rinde homenaje a José Antonio Muñiz Álvarez, quien en 1925 logró que la localidad se independizara administrativamente gracias a su incansable trabajo por mejorar las condiciones de la tierra. Hoy en día, el municipio está compuesto por seis parroquias: Marentes, Barcela, San Pedro de Enes, Río do Porto, Negueira y Ouviaño.
En 1953, la creación del embalse de Salime transformó radicalmente la vida en Negueira de Muñiz. La presa, que ocupa 685 hectáreas, partió la comarca en dos y sumergió varias aldeas bajo sus aguas, lo que forzó a muchos vecinos a abandonar sus hogares y buscar una nueva vida en otros lugares. La incomunicación fue tal que no fue hasta 1989 cuando se construyó el primer puente, el de Boabdil, que conectó ambas orillas y mejoró el acceso entre las dos partes del municipio.
Negueira de Muñiz es también sinónimo de resistencia. Durante la pandemia de Covid-19, todos sus ciudadanos lograron mantenerse libres del virus, como si las montañas y el aislamiento hubiesen actuado como una barrera natural contra la enfermedad.
Su paisaje es un regalo para los sentidos. Senderos y rutas atraviesan las laderas que rodean el río Navia, y su patrimonio arquitectónico está marcado por iglesias como la de San Salvador, del siglo XV, y la de Santiago de Ouviaño. Los hórreos de estilo asturiano y los lavaderos cubiertos en piedra, como los de Santalla y Ouviaño, conservan la esencia de la vida rural. Además, su entorno natural forma parte de la Red Natura 2000 y de la Red de Reservas de la Biosfera, convirtiéndolo en un lugar idóneo para el turismo activo y la observación de fauna y flora.