Veintinueve hierbas, flores, frutas y raíces procedentes de la región italiana de Calabria es lo que caracterizan al licor más amado de Italia, Vecchio Amaro del Capo, que tiene la intención de conquistar y ofrecer una "intensa experiencia de placer" a todo tipo de consumidores. Este producto de calidad es una apuesta del Grupo Caffo 1915, una empresa familiar nacida en el sur de Italia, con una larga tradición de maestros destiladores, "unidos por la pasión de elaborar y comercializar productos de altísima calidad", según explica la compañía.

El licor número 1 en Italia llega a nuestro país gracias al Grupo Caffo y de la mano de Pante Madrid, uno de los "mejores restaurantes" de gastronomía del sur de Italia en España. Y Nuccio Caffo, la cuarta generación de la empresa Caffo, lo tiene claro: "Hemos decidido empezar directamente en España porque creemos que podemos tener el mismo éxito que tuvimos en Italia".

Por ello, ambos se unieron para sorprender esta semana a los consumidores españoles con "un viaje por el sur de Italia a través del paladar", de la mano de uno de los mejores chefs italianos, Manfredi Bosco. Así, este maestro culinario, presentó la Cheesecake de Ricotta y Mascarpone usando Amaro del Capo como ingrediente en formato de gelatina. "En este postre me he inspirado en la tradición pastelera calabresa, donde se usan productos agrícolas autóctonos de la zona, que juegan un papel muy importante y sobre todo con la voluntad de transmitir los perfumes de mi tierra como los cítricos o las hierbas a través de Amaro del Capo", sostiene Bosco.

Además, a lo largo de su trayectoria, Amaro del Capo ha sido protagonista de numerosos premios internacionales como la Gran Medalla de Oro, en el Concurso de Selección Mundial de Bebidas Espirituosas en Bruselas que le ha sido otorgado en tres ocasiones en los últimos 15 años.

"Es un producto muy completo, y una oferta nueva y diferente que puede tener éxito entre los consumidores de España. Estamos muy convencidos de ello porque pensamos que el paladar español es muy parecido al italiano", explica a LA RAZÓN Nuccio Caffo.