María José González: “La otra" de Bigote Arrocet

En Marbella todo el mundo conoce a María José González, ex modelo, madre de un hijo y organizadora de algunos de los eventos más importantes de la Costa del Sol. En uno de ellos, el pasado mes de noviembre, el de Linda de España, la vimos compartiendo risas y escenario con su amigo más especial, Edmundo «Bigote» Arrocet, con el que celebró el 70 cumpleaños del artista el 29 de ese mismo mes... cuando todos hacía pensar que lo celebraría con su entonces pareja, María Teresa Campos.

Dicen que la veterana periodista conoce a «la otra» desde hace mucho tiempo, en esto coincide con su ex novio. Los tres guardan una buena amistad y han coincidido en diversos eventos marbellíes en los últimos años. Pero, ¿quién es esta mujer que tanta polémica mediática está levantando desde que ha comenzado el año? Pues bien, María José tiene 62 años, que no aparenta, y la mejor agenda de contactos del sur de España del mundo de la moda y las celebrities. Aunque se reconoce tímida, es una mujer con mucho don de gentes y una gran anfitriona. Se mueve en los círculos sociales y empresariales de Málaga con soltura y con un trato exquisito. Elegante, simpática, inteligente y muy creativa, nació en la localidad gaditana de Medina Sidonia, pero a los diez años se trasladó con su familia a la capital malagueña. Su padre falleció muy joven, víctima de un cáncer.

Comenzó una exitosa carrera de modelo con tan solo quince años y se presentó a certámenes de belleza, y logró el título de Miss Costa del Sol. Finalmente, hará unos treinta y cinco años, se retiró de las pasarelas para convertirse en maestra de modelos. Curiosamente, en su más tierna infancia soñaba con estudiar Magisterio. Y otra anécdota: en 1977 participó en el concurso «Guapas al sol», que, ironías de la vida, presentaban María Teresa Campos y el ex de Isabel Pantoja, Diego Gómez. Y quedó en cuarta posición en otro concurso de bellezas, el de «Maja de España».

Relación secreta

Es madre de un hijo, de una relación fallida, y hoy está soltera y sin otro compromiso que el que podría unirle a Arrocet. De confirmarse finalmente su presunta relación con el humorista, evidentemente lo estarían llevando tan en secreto que muy pocos conocen lo que realmente une a la pareja. Y la mujer a la que Arrocet llama «Teresita» ya ha dejado muy claro que si se confirman las infidelidades del que ella ha considerado durante los últimos seis años el hombre de su vida, sufriría uno de sus mayores disgustos. María José es una mujer que se ha hecho a sí misma. Luchadora, emprendedora, valiente en los malos momentos y admirada en el mundo en el que trabaja por su tenacidad y su profesionalidad.

Uno de sus amigos de toda la vida, José M., la define como «una mujer fiel a sus afectos, cariñosa, tímida, muy trabajadora. Si tiene algo con Arrocet, no nos lo ha dicho, es muy celosa de sus intimidades y no va pregonando datos de su vida personal. Desde que se separó del padre de su hijo no le hemos conocido grandes relaciones sentimentales. Ha estado muy volcada con su hijo, sobre todo en una etapa de su vida en la que al chico tuvieron que operarle por una grave enfermedad. Ahí demostró su fortaleza y que es toda una madraza. La pasión por su hijo es infinita. En el mundo laboral es admirada por su acierto en labores de organización de eventos y la envidian por sus importantes contactos. Pero, por encima de todo, es una persona sencilla a la que los éxitos no se le han subido a la cabeza».

En noviembre de 2019, en las fotos en las que aparece junto a Edmundo, se nota el afecto que siente por el entonces novio de María Teresa. Las miradas lo dicen todo, y en las suyas se puede adivinar una segunda lectura.

Hace apenas unos días un periodista la llamó por teléfono y le preguntó qué tipo de relación le unía con Edmundo. Y a María José le superaron los balbuceos y los nervios. Contestó con evasivas, aunque reconoció que le parecía un hombre muy guapo. Hubiera sido más fácil responder con un simple «no estamos enrollados» o «nuestra relación se resume en una simple amistad», si quería salir indemne del atolladero. Pero ese titubeo da pie a pensar que los rumores no van desencaminados. Y que esa amistad especial podría ir más allá del afecto de años. El próximo miércoles María José y Edmundo se verán las caras en FITUR, exactamente en el pabellón de Málaga, al que ambos han confirmado asistencia. Se espera una llegada masiva de paparazzis.

La ruptura del artista y la veterana comunicadora es una de las noticias más comentadas de los últimos dos meses. Aunque muchos llevaban años sin apostar por la relación sentimental de Teresa y Edmundo, como denomina el uno al otro en la intimidad, ellos dos siempre superaron los rumores de crisis y la opinión de las malas lenguas. Pero la situación parece haber cambiado y el tiempo les ha dado la razón.

El «pájaro», como Arrocet se bautizaba a sí mismo en el whatsapp en el que, según parece, comunicó a la Campos que volaba del nido, ya piensa en nuevos horizontes, entre ellos, una posible exclusiva en una revista, dando su versión de los hechos que le distanciaron de su María Teresa, y un próximo viaje a Australia para pasar una temporada con uno de sus hijos. Ya veremos a qué final nos conduce esta complicada y enrevesada historia.