Nuevo rumbo

Albert Rivera y Toni Cantó: máster de liderazgo a casi 8.000 euros

Después de su salida compleja de un bufete de abogados, encara un proyecto online ilusionante con su antiguo compañero de partido

Albert Rivera
Albert RiveraAlberto R. Roldán La Razón

El horizonte profesional de los políticos fuera de la moqueta del Congreso de los Diputados suele ser prolijo. Es el caso de Albert Rivera. El político catalán abandonó la política activa en noviembre de 2019, tras la debacle electoral de Ciudadanos. «Abandono la política para servir a otras personas. A mis padres, a mi hija, que la he visto demasiado poco; a mi pareja, que ha estado ahí siempre contra viento y marea», apuntaba en su despedida. Seis años después conocemos el que será su próximo destino profesional.

Albert Rivera será profesor en un Máster sobre Liderazgo en UTAMED, una universidad que se anuncia como «tecnológica online» que oferta másteres universitarios y grados de formación. El centro, localizado en Málaga, anuncia a Rivera como reclamo en el Máster de Liderazgo, una formación cien por cien online que dará comienzo en octubre, cuya duración son 9 meses y que funciona con un sistema de créditos. En el claustro, el expolítico comparte tribuna con otros perfiles del mundo de la política como José Manuel Villegas o el economista Daniel Lacalle. El negocio de la formación parece haber prendido fuerte en el espíritu emprendedor de Rivera. El político es también el profesor estrella de otro de los másteres que oferta el centro. Se trata del Máster en Comunicación y Oratoria, una formación que imparte en su calidad de experto como ex parlamentario autonómico y nacional y Campeón de la Liga de Debate Universitario en 2001, un certamen del que a día de hoy Rivera se presenta como presidente del jurado.

En el máster Rivera comparte competencias con un viejo amigo y también «ex Ciudadanos»: Toni Cantó. El actor se presenta como un especialista en expresión y comunicación escénica que, según reza su currículum, «trabaja habitualmente con profesionales para mejorar su comunicación». Una oferta online basada en un sistema de 60 créditos por el que los alumnos tendrán que rascarse el bolsillo. El curso cuesta 7.900 euros, una cifra que puede reducirse un 5 por ciento si se paga de una vez y por el que el alumno disfrutará de la formación y dos masters class presenciales extra que se imparten al finalizar el curso y en los que Rivera participa de forma presencial como ponente.

Toni Cantó
Toni CantóDavid JarLa Razón

Un lucrativo negocio el del conferenciante que se suma a otras iniciativas que Rivera mantiene en su perfil profesional, un ejemplo de político que busca reconvertirse, lejos del sillón de una eléctrica. Rivera es consejero de la empresa Meeting Lawyers SL, un bufete de abogados con sede en Barcelona en el que el expolítico comenzó siendo presidente, a su fundación en 2021, para convertirse en consejero en octubre de 2024. Junto a su amigo y ex de Ciudadanos, José Manuel Villegas, fundó en 2022, RV Estrategia SL, una consultora jurídica con sede en la calle Goya de la capital. La sociedad dedicada a las labores de intermediación obtuvo en 2023 unos resultados más que discretos. Rivera y su socio facturaron por sus servicios 196.000 euros declarando unas pérdidas tras impuestos de 5.227 euros. Aunque el balance no acompaña la sociedad declara en caja unos activos totales de casi 68.000 euros.

En febrero de 2021, Rivera también fundó Aldaluri SL, una sociedad holding gestada en Madrid, dedicada a la prestación de servicios de asesoramiento y apoyo a entidades participadas. La empresa, creada con un capital social de 55.000 euros, es propiedad de Rivera que figura como administrador y socio único. Aldaluri, sin indicios de actividad, no presenta balances contables en el registro mercantil.

Polémica salida

A sus iniciativas a título individual hay que sumar otras por cuenta ajena. Tras su salida de la política, Rivera volvió a su trabajo como abogado. En marzo de 2020 se incorporaba a la firma Abogados Martínez-Echevarría. Lo que parecía un proyecto ilusionante por la vuelta a su carrera como abogado, con sueldo top (pactó un sueldo de 300.000 euros al año y 25.000 euros brutos al mes) acabó en divorcio mediático en los juzgados. Finalmente, la salida de Rivera, casi 2 años después, se producía entre un cruce de acusaciones de «bajo rendimiento» e «incumplimiento del contrato» por ambas partes. Por el lado del despacho, se acusaba a Rivera de no responder a las expectativas generadas. Por su lado, el ex dirigente catalán se parapetaba en un supuesto incumplimiento de contrato, después de que el bufete decidiera no pagarle el bonus pactado.