Entrevista

Hablamos con Jaime Lorente: "Lo que más me cuesta de mi trabajo es estar lejos de mi familia"

El actor se sincera con LA RAZÓN sobre su salto a la dirección cinematográfica, las inseguridades propias de su trabajo y lo duro que le resulta separarse de su mujer e hijos

Jaime Lorente
Jaime LorenteGtres

El palacio de los marqueses de Amboagesede, sede de la Embajada de Italia en España, acogió la presentación de Devotion For Men Parfum, la nueva fragancia de Dolce & Gabbana, una noche rebosante de estilo y glamur que no se perdió Jaime Lorente. Allí, el actor se sinceró con LA RAZÓN sobre su salto a la dirección cinematográfica, las inseguridades propias de su trabajo y lo duro que le resulta separarse de su familia cuando la agenda le obliga.

-Si tuvieras que sacar un perfume propio, ¿a qué te gustaría que oliera?

Son dos cosas distintas: a qué huelo yo y a qué olería mi perfume. A veces, cuando cambio pañales, huelo a lo innombrable. Pero ahora mismo… pasión. Mucha pasión. Estoy a punto de enfrentar un proyecto que me llena de ilusión: mi ópera prima. Le estoy poniendo todo el amor del mundo.

-Cuéntame más sobre esa ópera prima.

Se titula “El mal hijo”. Empiezo a rodarla en una semana y media, con AF. Trata sobre los estragos de la enfermedad y la adicción dentro de una familia. Estamos contando esta historia con muchísimo cariño. Está inspirada en la novela de Salvador Molina: tomo la primera parte como germen y el resto es ficción. Llevamos unos cinco años intentando levantar el proyecto y, por fin, ha salido adelante.

-Desde “La casa de papel” no has parado de trabajar. ¿Te da miedo que llegue un momento en el que deje de sonar el teléfono?

Sí, lo pienso a veces. Pero intento centrarme en el agradecimiento y vivir día a día. Me ocupo de lo importante, que es mi familia. Si doy prioridad a eso, el trabajo está o no está, pero no puedo depositar ahí mi felicidad. Esta profesión tiene muchas idas y venidas.

-Supongo que lo más complicado ahora es la distancia cuando ruedas fuera. ¿Cómo llevas estar lejos de tu familia?

Es lo que más me cuesta. Rodar tanto fuera se hace duro. Pero este trabajo también tiene impases largos que me permiten disfrutar más de mis hijos y de mi mujer, cosa que una jornada de lunes a viernes no permitiría.

-La gente se imagina la vida de los actores entre yates y jets privados. ¿Cómo son realmente esos impases?

Nada de eso. Mis descansos son disfrutar de mis hijos, de mi mujer, de mi familia y de mi casa. Hacer deporte. Tranquilidad absoluta.