Gallardón plantea habilitar el mes de agosto para desatascar la Justicia

Muy poco ha tardado el nuevo ministro de Justicia en poner sobre la mesa sus primeras soluciones para aliviar el atasco judicial, que acumula más de tres millones de asuntos pendientes. Ayer, en la toma de posesión de la cúpula del Ministerio –encabezada por el secretario de Estado de Justicia, Fernando Román, y el subsecretario, Juan Bravo–, Alberto Ruiz-Gallardón abrió la mano a la posibilidad de que el mes de agosto deje de ser inhábil a efectos judiciales, una costumbre que «tenía sentido por razones históricas» pero que, recalcó, ahora no es «compatible» con «una cultura competitiva», informa Ep. Desde el Consejo General del Poder Judicial, su vicepresidente, Fernando de Rosa, considera positiva esa posibilidad. «La agilización de la Justicia exige un esfuerzo de todos», aseguró.

Los ecos de la iniciativa pronto llegaron a las asociaciones judiciales. La mayoritaria Asociación Profesional de la Magistratura la considera «positiva». Para su portavoz, Pablo Llarena, «no parece lógico que en un país desarrollado se paralice el sistema judicial». Esta asociación reclama, eso sí, que la medida venga acompañada de una modificación de horarios y un refuerzo de la plantilla.

Por su parte, el portavoz de Jueces para la Democracia, José Luis Ramírez, califica la propuesta de «populista e incoherente» y cree que «agravaría» los problemas. «Refleja –se queja– una falta de voluntad real de solucionar los problemas de la Justicia y proyecta la falsa imagen de que el problema del atasco es de los jueces».

José Luis González Armengol, portavoz de la Asociación Francisco de Vitoria, recuerda que «tanto la Sanidad como la Administración de Justicia trabajan los 365 días del año» y subraya que en la segunda quincena de julio y la primera de septiembre muchos juicios han de suspenderse porque los testigos están de vacaciones. «En agosto, de cada diez juicios se celebraría uno», augura.