Levante U.D.

La tradición

La Razón
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La selección española trató de jugar a su manera, al toque y logró el triunfo a la manera tradicional: pases desde las bandas y remates de cabeza. Dos veces halló la portería Llorente y la tercera fue cosa de Silva. Hasta ese momento se dominaba, pero no se goleaba. Estaba previsto que Lituania se encerrara en su campo y únicamente buscara una afortunada contra.

Estaba previsto que la vida sin Xavi es posible, aunque menos. Por juego no hubo ocasión de pensar en su ausencia. A pesar de que Iniesta no hizo papel similar. No jugó Xabi por una amigdalitis, pero contra un muro era tal vez menos notorio. Cazorla cubrió su baja aportando el fútbol colorista de los pequeñitos jugones y un centro de gol. Hubo momentos, como habitualmente, con Xavi y sin él, que el juego se desarrolló por el centro. Las bandas quedaron reducidas a la izquierda en la que Villa, reforzado por Capdevila, buscó el gol y el pase que permitiera marcar a un compañero. La derecha no era lo que se requiere cuando se coloca de delantero a Llorente. Bastó un centro de Capdevila para que el del Athletic consiguiera su primer remate de cabeza. Su acción permitió a Villa disparar a puerta vacía contra el poste. Lituania, antes había dado un susto resuelto por Casillas.

El empate lituano, despiste defensivo de Ramos, más acertado en los centros al área que valieron dos dianas, hizo temer lo peor, pero sólo unos instantes. Se encontró el gol contra el muro de turno.