La Audiencia prohíbe la «exaltación del currículo delictivo» de Riera

MADRID- Laura Riera, que saldrá hoy de prisión tras cumplir su condena a nueve años de cárcel por colaborar con ETA, no tendrá en Barcelona el recibimiento que se esperaba. La Audiencia Nacional prohibió ayer –a instancias de la Fiscalía y de Dignidad y Justicia (DyJ)– los actos de bienvenida convocados por diversas organizaciones radicales ante los «contundentes» indicios de que, en realidad, lo que se pretende es «legitimar» sus actividades terroristas. Por eso, pide a la consejería de Interior de la Generalitat que adopte las medidas oportunas para impedir su celebración y que identifique a las personas que, en su caso, insistan en agasajar a la etarra.

El juez Pablo Ruz mantiene que esa convocatoria –efectuada en el marco de las fiestas alternativas del barrio barcelonés de Gràcia– constituiría una «exaltación al currículo delictivo» de Riera y de las otras dos etarras a las que se pretendía rendir homenaje, Dolores López Resina y Marina Bernardó, condenadas por integración en la banda terrorista y que cumplen condena en Francia.

«Presas políticas»
La única finalidad de esta iniciativa, añade el magistrado, es denunciar que las homenajeadas «tienen la consideración de "presos políticos"», cuando –insiste Ruz– está acreditado que las tres fueron condenadas «no por su ideología o pensamiento», sino por su colaboración o pertenencia a ETA. Para el instructor resulta especialmente llamativo que en el manifiesto del acto de bienvenida –previsto para las siete de la tarde en la plaza del Raspall del barrio de Gràcia– se anime a «continuar con la "lucha armada"» con estas palabras: «Laura saldrá de la cárcel, pero las causas que la llevaron a luchar y a sufrir el encarcelamiento continúan vigentes».

Esta aseveración supone, insiste, «una legitimación de las actividades terroristas» que llevaron a cabo las tres homenajeadas y «un llamamiento a continuar desarrollando ese tipo de "lucha"», con el consiguiente desprecio y humillación a las víctimas.

«Fin ilícito»
Ruz tiene claro que esta justificación de la actuación terrorista y el ensalzamiento de sus autores «es la que impone la dirección de la banda», por lo que se trata de un «fin ilícito» que no está amparado ni por el derecho de reunión ni por el de manifestación.
El juez tampoco pasa por alto que una de las organizaciones convocantes, Rescat, presta desde 2001 «un fuerte apoyo» a catalanes detenidos o condenados por su relación con ETA. Además, recuerda que junto al colectivo SAT, que también respalda la iniciativa, organizó el pasado enero un homenaje a otros dos colaboradores de la banda, Diego Sánchez Burria y Zigor Larredonda, condenados por auxiliar a los terroristas.

Se trata, abunda el juez recogiendo los argumentos del fiscal Marcelo de Azcárraga, de «grupos de individuos que desarrollan sus actividades de forma subrepticia» tratando en lo posible de eludir «cualquier tipo de control». No son, recuerda el magistrado, organizaciones constituidas legalmente y mantienen «la máxima opacidad posible al objeto de impedir su identificación», por lo que no existe constancia de comunicación oficial alguna de la convocatoria a la autoridad gubernativa.

Acto de justicia
- La prohibición por parte de la Audiencia de Nacional del homenaje a la colaboradora de ETA Laura Riera hoy en Gràcia dejó en evidencia la pasividad del Ayuntamiento de Barcelona y la consejería de Interior en los últimos días. El presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández, se mostró «muy satisfecho por la resolución de la Audiencia, que ya había reclamado el PP ante la misma, y que pone en evidencia a Montilla, Saura y Hereu, dado que ni la Generalitat, ni el Ayuntamiento no sólo no hicieron nada para impedir el acto, sino que además guardaron silencio». El PP pidió que Saura y Hereu «ordenen a los Mossos d'Esquadra, a quienes corresponde cumplir la resolución de la Audiencia, y la Guardia Urbana prestando su apoyo logístico» que velen hoy para que no tenga lugar el homenaje convocado por los antisistema.
- El presidente del grupo municipal de CiU, Xavier Trias, también criticó la nula iniciativa de Hereu. «Hay cosas frente a las que se debe decir no, el Ayuntamiento se debe cuadrar», aseguró.