Cataluña

Artur I el Soberanista

La Razón
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Durante muchos años creí que Artur Mas era un moderado y que los soberanistas eran otros, pero me equivoqué. No hay nada peor que un converso porque tiene que demostrar su nueva fe desde la desmesura. Lo hace, además, con la arrogancia del neófito que vivió plácidamente durante los años del franquismo en el seno de una familia acomodada y no se le conoce ninguna inquietud nacionalista con tintes «heroicos». Un amigo siempre me decía que Mas era el yerno perfecto para cualquier padre o madre. Pujol lo promocionó convencido por sus hijos porque era el funcionario aplicado. Ahora se ha convertido en Artur I, el Soberanista y cada semana lanza una nueva soflama que empequeñece al Pujol más nacionalista. Cualquier día se asoma al balcón del Palau de la Generalitat y proclama la independencia de Cataluña. Es capaz de eclipsar en este terreno a Cambó y Companys. Mas habla como si fuera la voz de Cataluña. Lo hace como si gozara de una mayoría absoluta, pero no la tiene. El PP debería recordárselo.