Asia

Tokio

Entre 200 y 300 cadáveres hallados en Sendai

Entre 200 y 300 cadáveres han sido localizados en una playa próxima a Sendai, la localidad más cercana al epicentro del terremoto de 8,9 grados que se produjo este viernes en la costa nororiental de Japón, según informó la Policía de la prefectura de Miyagi, citada por la agencia estatal de noticias Kiodo.

La Policía Nacional difundió poco antes un balance de 60 muertos, 56 desaparecidos y 241 heridos, todos ellos en el noreste y este de Japón. Según esta fuente, 24 personas habrían fallecido en la prefectura de Iwate directamente a causa del terremoto y otras dos por efecto del tsunami posterior. Asimismo, se habrían registrado uno o más muertos en las prefecturas de Fukushima, Miyagi, Tokio, Ibaraki, Chiba, Kanagawa y Tochigi.

A esto se suman docenas de desaparecidos, entre ellos los cerca de cien pasajeros de un barco que fue arrastrado por las aguas en la costa oriental, poco después de haber partido del puerto de Ishinomaki, en la provincia de Miyagi.

Además hay numerosos heridos, entre ellos cerca de 60 sólo en Tokio, donde el terremoto ha hecho temblar largamente los edificios, ha paralizado el servicio de metro y ha bloqueado las líneas de teléfono móvil, según las autoridades locales.

Esta ha sido una de las zonas más afectadas, ya que el epicentro del temblor se situó en el Océano Pacífico a 130 kilómetros de su costa, a una profundidad de 20 kilómetros.

Se teme que la cifra de muertos se eleve a medida que avanza el recuento, ya que hay edificios derruidos en varias zonas y en algunos lugares el tsunami hizo que las aguas se adentraran hasta cinco kilómetros en el interior.

El terremoto también provocó cerca de 80 incendios
en el norte y el este del archipiélago, incluido un pequeño fuego en el centro nuclear de Onawaga, que pudo ser controlado sin que se produjera ninguna fuga, según la operadora de la planta, Tohoku.

Los incendios obligaron a numerosas plantas industriales a suspender la producción, incluida una gran refinería en la provincia de Chiba, donde se produjo una fuerte explosión unas horas después del seísmo sin que se haya informado de víctimas.

Otros grandes grupos nipones como Toyota, Sony o Nissan también paralizaron su producción en las plantas de la zona y evacuaron a sus empleados.

Once reactores nucleares cerrados
Asimismo, once reactores nucleares han paralizado su actividad en Japón tras el terremoto de 8,8 grados en la escala abierta de Richter que ha sacudido el este del país, aunque el Gobierno ha asegurado que no se han producido fugas radiactivas.

Pese a asegurar que no hay constancia de "materiales radiactivos fuera de las instalaciones", Japón ha declarado el estado de emergencia de energía atómica, tal y como establece la legislación nipona ante este tipo de sucesos. "Partes de las centrales nucleares se apagaron automáticamente tras el terremoto", relató en rueda de prensa el primer ministro nipón, Naoto Kan.

Un incendio próximo a la turbina del centro de generación de electricidad de Onawaga condujo a extremar las precauciones en ese lugar, pero, según la operadora de la planta, Tohoku, el fuego está controlado, no se ha producido ningún escape y no existe riesgo alguno.

"La central está parada", insistió Tohoku, que gestiona esta planta situada en la zona más afectada por el sismo, tras especificar que el fuego se originó sobre las 3.50 hora local (19.50 GMT), casi media hora después de que finalizase la fase más intensa de temblores.

Según la agencia local Kyodo, todas las plantas ubicadas en la zona costera más afectada por el sismo anunciaron que no registraron ninguna anomalía a causa del terremoto.