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El Cairo

La comunidad mundial insta a Mubarak a escuchar al pueblo y acometer reformas

Las protestas contra el régimen del presidente de Egipto, Hosni Mubarak, llevaron hoy a la comunidad internacional a expresar su preocupación por la situación en ese país, a alertar contra la violencia y a pedir a El Cairo que escuche las demandas de los ciudadanos y acometa reformas.

La secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, instó al Gobierno egipcio a contener a las fuerzas de seguridad, permitir las protestas pacíficas, que evidencian "profundas quejas"en la sociedad, y modificar "los pasos sin precedentes"que ha tomado el Ejecutivo para bloquear las comunicaciones.

Añadió que, tal como dijo ayer el presidente estadounidense, Barack Obama, "es absolutamente crítico para el bienestar de Egipto"que se acometan cambios y señaló que, en opinión de EE UU, el Gobierno egipcio debe dialogar "inmediatamente"con el pueblo para poner en marcha las "necesitadas reformas económicas, políticas y sociales". "Queremos trabajar con los egipcios y con su Gobierno para hacer realidad su aspiración de vivir en una sociedad democrática que respete los derechos humanos", destacó.

Por su parte, la Unión Europea (UE) pidió al Gobierno egipcio que emprenda "urgentemente"una vía para establecer reformas democráticas y sociales que respondan a las aspiraciones "legítimas"del pueblo. La jefa de la política exterior de la UE, Catherine Ashton, urgió a las autoridades egipcias a "la liberación inmediata e incondicional de todos los manifestantes detenidos".

También el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien deseó que la situación se resuelva "sin más violencia", llamó a "los líderes de Egipto"a escuchar las "preocupaciones legítimas y los deseos"de sus ciudadanos y les sugirió que vean las manifestaciones y el descontento en las calles como "una oportunidad para poder establecer un diálogo que colme dichas reivindicaciones".

Al respecto, la alta comisaria de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, pidió al Gobierno egipcio que investigue la muerte de civiles, debido al uso indiscriminado de la fuerza para contener las manifestaciones populares, y que se garanticen las libertades de expresión, información y reunión de la ciudadanía.

Igualmente, la canciller alemana, Angela Merkel, demandó a Mubarak que autorice las manifestaciones pacíficas y agregó: "no sirve de nada encarcelar a las personas y censurar el flujo de la información. Es necesario un diálogo pacífico. La estabilidad del país es muy importante, pero no a cualquier precio, no al precio de la libertad de expresión".

El Reino Unido, a través de su ministro de Exteriores, William Hague, instó al Gobierno egipcio a responder a "las demandas legítimas de desarrollo económico y de un sistema político más abierto y flexible".

Llamamiento al diálogo
En la misma línea, la jefa de la diplomacia francesa, Michèle Alliot-Marie, hizo un llamamiento a la "contención"y al "diálogo entre todas las partes"porque solo éste "puede permitir una evolución significativa y positiva de la situación para tener en cuenta las aspiraciones que se manifiestan de mayor libertad y democracia".

Italia, que sigue la situación "con atención y fuerte preocupación", abogó por el cese "de todo tipo de violencia"y el respeto de las libertades civiles, de expresión y comunicación y del derecho a manifestarse de forma pacífica, al tiempo que señaló que la estabilidad ha de consolidarse a través de "un diálogo concreto y constructivo entre las instituciones y la sociedad civil".

De la misma forma, el Gobierno español pidió que se evite "todo tipo de violencia"en las calles de Egipto y que las libertades de expresión y de reunión pacífica sean "ejercidas y respetadas", al tiempo que confió en que "las aspiraciones políticas, económicas y sociales del pueblo egipcio se canalicen por la vía del diálogo pacífico".

Desde América, el Ejecutivo de Canadá solicitó a las autoridades egipcias que respondan a estas protestas de forma pacífica y que aseguren el respeto a la libertad de expresión, en particular el desbloqueo de los sitios de internet.

Asimismo, el Gobierno brasileño espera que Egipto, Túnez y Yemen puedan avanzar hacia una evolución política "capaz de atender a las aspiraciones de la población en un ambiente pacífico y sin interferencias externas".

Mientras tanto, el mundo árabe e Israel no han emitido reacción alguna sobre las protestas en Egipto, que comenzaron el pasado martes.