Ámsterdam

ETA en campaña

La Razón
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Antes fue el comando mediador del sudafricano Currin y ahora la Fundación Dialogue Advisory Group de Ámsterdam. Entre una y otra estuvo la Fundación Henry Durant de Suiza, que se hizo con algunos titulares de prensa este verano. La cosa es meter ruido con la zambomba de ETA y más según se acerca el 20-N. La cosa es meter a ETA en campaña electoral con dos objetivos indisimulados por parte del PSOE: vender el producto de una inminente autodisolución de la banda que ni ha tenido ni tendrá lugar y descolocar al PP, romper su temple y sacarle del debate económico como sea porque en él Rubalcaba naufraga irremisiblemente. Este segundo objetivo no es nada desdeñable para los socialistas y en él se emplearon a fondo durante la campaña del 22 de mayo. A la legalización de Bildu por el Constitucional le siguió la amenaza de legalizar Sortu por parte del Supremo y todas las declaraciones hirientes para las víctimas que hizo Patxi López con el fin de dividir al constitucionalismo que hoy el PP representa en soledad.
Ahora viene una repetición de la jugada pero sacando todos los ases tramposos de la manga. Entran en campaña los terroristas del colectivo de presos mientras EKIN dice que se disuelve cuando lo prometido es la autodisolución de ETA. Y Patxi López no sólo llora por las condenas de Otegi y Usabiaga, sino que promete «acercamientos». No es un error. Es una estrategia. Para crispar al PP. Para dividirlo. Para no hablar de economía. Para que olvidemos que la victoria de Rajoy es la derrota de ETA. Para soliviantar a las víctimas. Quieren obtener los votos del nacionalismo a base de su dolor. En eso está Patxi y estos días podemos esperar cualquier cosa. Si «hace falta», volverá a fotografiarse con etarras.