CiU auditará las finanzas de la Generalitat si gana las elecciones

Barcelona- A pesar de los recortes públicos y de las medidas para contener el gasto, CiU está convencida de que las arcas catalanas, lejos de recuperarse, empeorarán el próximo otoño. Por este motivo, los convergentes analizarán con qué dinero cuenta Cataluña si logran desbancar al tripartito en las próximas elecciones.
Así lo avanzó el portavoz de CiU en el Parlament, Oriol Pujol, en una entrevista concedida a Ep. Para Pujol, varios síntomas evidencian que el panorama financiero catalán está peor de que lo que el propio Govern lleva meses señalando.
Dificultades y despilfarro
Según el portavoz nacionalista, varias instituciones pertenecientes a la Generalitat pasarán apuros para pagar nóminas durante los próximos meses de septiembre y octubre. Además, señaló que hay obras adjudicadas e iniciadas que no podrán cobrarse y a varios ayuntamientos se les ha comunicado por carta que se les han denegado subvenciones.
«Todo esto dibuja un panorama financiero que nos obligará a saber y a poder diagnosticar cuál es la magnitud de la tragedia», afirmó Pujol. Más aún, actualmente la Generalitat «tiene serias dificultades para cubrir la emisión de deuda pública que hace, y que por primera vez en la historia, pospone el pago de conciertos sanitarios».
Ante esta situación y la falta de transparencia del tripartido, Pujol afirmó que «esto nos obligará a auditar y a sumergirnos para saber qué está pasando» y añadió que, con los resultados del análisis financiero, «se evidenciará que el modelo de financiación del conseller Antoni Castells y del presidente de la Generalitat, José Montilla, en el mejor de los casos, nos tocará pagar».
Y quiso ejemplificar la conyuntura que atraviesa Cataluña al recordar que en 2009, el déficit de la Generalitat se situó en 4.706 millones de euros, lo que vino a ser el 2,42 por ciento del PIB catalán, el doble de lo que el Govern había previsto a principios del año pasado. Pujol quiso recordar que el Govern llegó a desembolsar más de 700.000 euros en informes inútiles. Gastos que el propio Castells admitió el pasado mes de mayo ante el Parlament. En este sentido, para CiU estas cifras reflejaron entonces «el gasto descontrolado y el desbarajuste» que ha existido y existe en la gestión de las arcas públicas.