Festivales de Música

Accedieron al recinto dos 421

La Razón
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Madrid- Al tiempo que la investigación continuaba centrándose en confirmar si la noche de Halloween se superó el aforo permitido en el pabellón Madrid Arena de la madrileña Casa de Campo, las redes se inundaban de pruebas de la presunta estafa cometida por la empresa organizadora de el Thriller Music Park, Diviertt S. L.

Varias imágenes que podrían ser dos entradas para el festival con idéntica numeración (unas de ellas con el número 421) o los fraudes que pudieron cometerse con la copia masiva de las entradas adquiridas a través de internet centran ahora las pesquisas policiales y podrían dar la respuesta de lo que ocurrió para que se produjera una avalancha que se saldó con cuatro jóvenes fallecidas. ¿Pudieron acceder al pabellón varias personas con la misma entrada? ¿Se cumplieron las medidas de seguridad y se registró a los asistentes para evitar que introdujeran petardos? Éstas son las claves para las familias de las chicas, que están recopilando toda la información disponible sobre la organización del evento para poder exigir responsabilidades ante la Justicia.
Fuentes de la organización de la fiesta, sin embargo, continuaban ayer negando que se superara el aforo permitido y que accedieran menores más allá de chica de 17 años que falleció ayer. En declaraciones a la Cadena Ser, Jorge Morales, portavoz de Diviertt, insistió en que vendieron 9.650 entradas y que dentro del recinto había ese mismo número de personas. Asimismo, y en contra de las versiones de los testigos, insistió en que en el evento «había un riguroso control de acceso» en el y que las entradas se validaron para impedir fraudes.

En las redes sociales algunos de los asistentes a la fiesta se empeñaban en negar que se cumplieran con las medidas de seguridad y, agrupados bajo el «hangstag» #yotambiensoymenoryviaAoki, varios usuarios de Twitter dieron fe, a través de imágenes, de su presencia en la fiesta a pesar de que, aseguran, no han cumplido aún 18 años. «Es una vergüenza que digan que Belén era la única menor en la fiesta cuando saben que no pidieron DNI», relató Beatríz, testigo de la avalancha.