Sevilla
La Junta compara ahora las protestas de los funcionarios con Batasuna
El Ejecutivo andaluz dispara el termómetro de la negociación mientras trata de llegar a un acuerdo en la Cámara.
SEVILLA- La estrategia del Gobierno andaluz y del PSOE-A no pasa precisamente por apaciguar el enfrentamiento abierto con los sectores más críticos con el decreto de reordenación del sector público. Después de que el portavoz parlamentario socialista, Mario Jiménez, comparara el martes la actitud de los manifestantes con el fascismo por amenazar con boicotear la campaña de las municipales, ayer el consejero de Gobernación y Justicia, Luis Pizarro, caldeó aún más el ambiente. El ex vicesecretario general del PSOE-A aseguró que la decisión anunciada por algunos grupos de funcionarios se parece bastante al «fascismo» y que es lo que hace precisamente Herri Batasuna ante los actos electorales de los socialistas en el País Vasco, recoge Europa Press.
La polémica prendió el lunes, cuando la Plataforma de Empleados Públicos de la Junta, además de otros sindicatos como CSIF-A, CGT-A, SAT, USO o Ustea, registraron en la Subdelegación del Gobierno en Sevilla una convocatoria de manifestación para el día 22, que se prevé que sea la más multitudinaria de todas las llevadas a cabo hasta ahora, con 50.000 personas.
El portavoz de la Plataforma de Empleados Públicos de la Junta, Emilio Sempere, dijo que si la Junta no se avenía a razones, no habría «paz social» y que seguirían «reventando» actos públicos, entre ellos la campaña de los próximos comicios municipales de mayo. Lo llamativo es que frente a esta dureza verbal por parte de miembros de la Junta y del PSOE, el Ejecutivo andaluz trata de llegar a un acuerdo con los sindicatos y con la oposición en la tramitación del Proyecto de Ley de la reordenación del sector público que ha comenzado esta semana en el Parlamento.
Así las cosas, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, consideró ayer un «disparate monumental» que el PSOE-A esté «incendiando» la función pública «desde las directrices del señor Griñán a algún lugarteniente», al tiempo que consideró «gravísimos» los insultos proferidos por el PSOE. En este sentido, ironizó asegurando que el presidente de la Junta debería hacer un curso titulado «cómo pactar desde el insulto».
UGT-A, junto a CC OO-A, son los dos únicos sindicatos que sí han llegado a un acuerdo con la Junta en la reordenación del sector público. Sin embargo, el máximo dirigente de UGT-A, Manuel Pastrana, consideró ayer que «cualquier tipo de declaración que dificulte las posibilidades de entendimiento es una auténtica metedura de pata», al tiempo que mostró su deseo de que «cualquier responsable de un grupo parlamentario utilice en su relación con los demás un lenguaje en forma y contenido de manera que facilite la aproximación en este tema». Asimismo, el coordinador regional de IU, Diego Valderas, alertó ayer de la «peligrosa deriva» de la confrontación política y sindical a propósito de la reordenación del sector público andaluz, y pidió a los funcionarios que respeten la próxima campaña electoral y al PSOE y PP que pongan fin a los «insultos».
Y Griñán oliendo setas para «olvidar» las protestas
- Los funcionarios siguen con su agenda de movilizaciones. Un centenar de ellos irrumpió en la campaña de promoción de la candidatura «Córdoba 2016» que se celebró en el Palacio de Congresos, un acto al que asistió el presidente andaluz. Por la tarde, Griñán eligió otro destino más tranquilo: el jardín micológico «La Trufa» del municipio cordobés de Priego de Cordoba, en el que se crían setas «sostenibles».
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