Castilla y León

«Las leyes no se deber reformar a golpe de acontecimientos sociales actuales»

José Luis Concepción se muestra partidario de cambios en los desahucios

El presidente del TSJCyL, José Luis Concepción, en Valladolid
El presidente del TSJCyL, José Luis Concepción, en Valladolidlarazon

Valladolid- «Las leyes no se deben de reformar a golpe de acontecimientos sociales». Así de contundente se mostraba el presidente del Tribunal Superior de Justicia, José Luis Concepción, respecto a un cambio legislativo en el ámbito hipotecario, debido a los numerosos desahucios que hay a diario. «Las leyes se deben de reformar a través de una reflexión sosegada y no hay sosiego en ese tema ni en otros muchos», dijo.

El presidente del TSJCyL pronunciaba una conferencia en la capital vallisoletana, invitado por el Club de Opinión Santiago Alba, que versaba sobre el modelo de justicia que, en su opinión, España necesita en estos momentos, haciendo hincapié en que «ninguno de los gobiernos democráticos habidos en España ha hecho una verdadera reflexión sobre el modelo que necesita un país en el siglo XXI». Es por eso, que señaló que «es bueno diseñar con imaginación un modelo, pese a la crisis actual, para que luego sea realmente aplicable cuando los medios económicos nos lo puedan permitir».

Respecto a la modernización de la justicia resaltó que es una cosa prioritaria, pero que los medios existentes «no nos permiten dar ese último paso».

José Luis Concepción reivindicó un modelo de juez profesional, independiente, técnicamente preparado y moderno y abierto a la sociedad, a la vez que el Poder Judicial «sea de una vez por todas el tercer poder del Estado en igualdad plena con los otros dos poderes, con el Ejecutivo y el Legislativo. Con una autonomía en todos los ámbitos, incluido también el presupuestario».

El presidente del TSJCyL también fue preguntado por la aprobación del Tribunal Constitucional del matrimonio homosexual por ocho votos a tres, pero rechazó hacer valoración alguna sobre esta resolución judicial, mostrando su respeto a TC y declarando que las decisiones adoptadas hay que «acatarlas». Lo que es «llamativo» es que se «haya tardando tanto».

En este sentido, aseguró que la lentitud judicial es una de las asignaturas pendientes de la justicia española, aunque se felicitó de cómo está funcionado el sector en Castilla y León, ya «que estamos dando un ejemplo de eficacia en tiempo y de calidad», aunque resaltó que la crisis está llevando más casos a los tribunales.

Por último, manifestó que «no puede haber una tasa disuasoria para que los ciudadanos se acerquen a la justicia para resolver sus problemas, pero sí una que redunde en los propios medios para que la justicia pueda funcionar. Tasa sí, pero con ciertos matices».