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Pekín

Corea del Norte pone en alerta al Ejército y rompe todas sus relaciones con el Sur

La prohibición de paso por los estrechos surcoreanos perjudica a Pyongyang

Activistas surcoreanos prenden fuego un cartel con el líder norcoreano durante una manifestación contra Corea del Norte celebrada frente a la Asamblea Nacional en Seúl (Corea del Sur)
Activistas surcoreanos prenden fuego un cartel con el líder norcoreano durante una manifestación contra Corea del Norte celebrada frente a la Asamblea Nacional en Seúl (Corea del Sur)larazon

Seúl- El régimen de Pyongyang decidió ayer romper todas sus relaciones con Seúl, al tiempo que amenazaba a Corea del Sur con posibles «medidas militares», en plena escalada de tensión en la inestable península coreana.Los duros intercambios verbales entre un aislado régimen comunista con poder nuclear y un destacado aliado de EE UU se producen a raíz de que una investigación determinase la autoría norcoreana en el hundimiento de un navío surcoreano en el que murieron 46 marineros.Las amenazas comunistas se han redoblado después de que el lunes el presidente surcoreano, Lee Myung Bak, anunciase la suspensión del comercio intercoreano y la navegación por sus aguas territoriales, y decidiera llevar ante la ONU el hundimiento de la corbeta.Además de poner en alerta a su Ejército, Pyongyang ha calificado de «farsa» la investigación de ese hundimiento, del que en todo momento ha negado su responsabilidad, y amenaza con «medidas militares» a Seúl. En un comunicado del norcoreano Comité para la Reunificación Pacífica de Corea recogido anoche por la agencia oficial KCNA, el régimen comunista afirmó que no retomará el diálogo intercoreano durante el mandato de Lee como presidente de Corea del Sur.«Declaramos formalmente que, desde ahora, pondremos en marcha medidas resolutivas para congelar las relaciones intercoreanas», indicó ese organismo comunista. Anunció además que prohibirá el paso de barcos y aviones surcoreanos a través de su espacio territorial, paralizará la cooperación intercoreana y expulsará al personal de Corea del Sur de su complejo industrial de Kaesong, durante años un símbolo de la futura reunificación de las dos Coreas.Entretanto, la secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, llega hoy a Seúl para analizar con las autoridades surcoreanas la respuesta diplomática a Pyongyang. Clinton visitó previamente Pekín, donde reiteró el total apoyo estadounidense a Corea del Sur. Mientras, China, el único gran aliado que le queda a Pyongyang, aboga por la calma y el diálogo entre las dos Coreas para solucionar el conflicto. También el presidente de Rusia, Dimitri Medvedev, pidió contención para impedir la escalada de tensión entre las dos Coreas.