Barcelona

Golpe contra los talleres ilegales

La operación policial duró casi todo el día, y sigue abierta a la espera de más inspecciones en talleres clandestinos.

Golpe contra los talleres ilegales
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barcelona - Fue una macrooperación sin precedentes en Cataluña, lo nunca visto. Casi 750 agentes de los Mossos d'Esquadra se encargaron ayer de intervenir en 72 talleres téxtiles chinos clandestinos de Mataró (Barcelona), donde trabajaban de forma ilegal ciudadanos de ese país.
A última hora de la tarde de ayer, el consejero de Interior, Joan Saura, anunció que los detenidos «eran entre 20 y 30». Calificó de «importantísima» la operación, contra la explotación laboral y el tráfico de seres humanos. Los detenidos fueron trasladados a las comisarías de Mataró, Badalona y Arenys de Mar. Muchos de estos talleres clandestinos estaban ubicados en polígonos industriales.
El origen de la operación reside en la decisión de la Fiscalía del Crimen Organizado, que sospechó que en estos talleres clandestinos «podrían no respetarse los derechos de los trabajadores», hecho que se convirtió en realidad, según las detenciones de la Policía Autonómica.

Condiciones infrahumanas

Obviando las actuaciones de orden público, algunas de ellas muy recientes, se trata de la mayor operación llevada a cabo por los Mossos. Los detenidos son los responsables de una red que tenían sometidos a sus compatriotas en unas condiciones infrahumanas. Casi no podían salir de los locales intervenidos y pasaban casi todo el día en estos espacios. Fueron liberados tras la actuación policial.
No es la primera vez que en Cataluña se lleva a cabo una operación similar. En municipios como Badalona o Santa Coloma de Gramenet, ambos en la periferia de Barcelona, es abundante la presencia de talleres chinos clandestinos, con las consecuentes quejas vecinales. En el caso de Mataró, el juez decretó secreto de sumario, por lo que no trascendieron detalles sobre la operación, que aún sigue abierta.
Lo que quedó confirmado es que a los 30 ciudadanos chinos detenidos se les acusa de un delito contra los derechos de los trabajadores. La intervención policial no se limitó a la investigación de presuntos talleres clandestinos, sino que fue más allá. Los Mossos inspeccionaron pisos particulares de ciudadanos chinos de Mataró, en los que también supuestamente se explotaba a trabajadores. Está previsto que hoy se anuncien más detalles de la operación.