Conciertos

La fiesta de la lírica se rinde ante Christa Ludwig

Ismael Jordi y Adrianne Pieczonka acompañaron a Ludwig durante el final de la gala
Ismael Jordi y Adrianne Pieczonka acompañaron a Ludwig durante el final de la galalarazon

Sólo han pasado cuatro años desde que la Fundación del Teatro Campoamor decidió poner en marcha sus premios líricos. Sin embargo, su corta vida no les ha impedido atraer a las personalidades más destacadas de la ópera actual. Entre ellas, la mezzosoprano alemana Christa Ludwig, una de las mejores voces de la lírica de la segunda mitad del siglo XX, que recogió el premio especial a toda una carrera. «Estoy muy encantada de recibir esto», fueron las palabras en español (ensayadas pocas horas antes de la gala) con las que la cantante agradeció el galardón. Esta cuarta edición, ágil y cómica, estuvo amenizada por la presentación de las actrices Esperanza Pedreño y Paula Galimberti y la intervención del tenor Ismael Jordi y del bajo Simón Orfila. Además de explotar su faceta de cantantes, Jordi y Orfila quitaron hierro a la sucesión de premios con la interpretación de los más disparatados «gags».Breve representaciónAdemás de la recogida del galardón, algunos artistas ofrecieron al público del Campoamor una breve representación. Fue el caso de Maite Alberola (mejor cantante revelación), Pepa Rosado y Rafael Castejón (mejor actriz y actor de zarzuela), Marcelo Álvarez (mejor cantante masculino de ópera), Ismael Jordi (mejor cantante de zarzuela) y Adrianne Pieczonka (mejor cantante femenina de ópera). En el Campoamor se pudieron ver, además, extractos de la mejor producción de ópera «Death in Venice», realizada por el Gran Teatre del Liceu y el Real; de «Vec Makropoulos», cuyo director de escena, Krzysztof Warlikowski, también fue galardonado; y de «Katia Kabanova», con la que Jiri Belohlavez ganó el premio al mejor director musical. Además, Mirna Lacambra, presidenta de la asociación Amigos de la Ópera de Sabadell, recogió el premio a la contribución al mundo de la lírica.