Jair Bolsonaro

El Supremo brasileño investigará a Bolsonaro tras las acusaciones del exjuez Moro

Podría haber cometido delitos de coacción, prevaricación y obstrucción de Justicia, entre otros. El presidente coloca al frente del Ministerio de Justicia a un pastor presbiteriano

Brazil's President Jair Bolsonaro walks outside the Alvorada Palace, amid the coronavirus disease (COVID-19) outbreak in Brasilia
Jair Bolsonaro camina este lunes en los alrededores del Palacio de Alvorada sin ningún tipo de protecciónUESLEI MARCELINOReuters

La Corte Suprema de Justicia de Brasil ha ordenado investigar al presidente del país, Jair Bolsonaro, a quien al exministro de Justicia Sergio Moro acusó de haber interferido políticamente en el Poder Judicial. La decisión la ha tomado el magistrado Celso de Mello, quien este lunes respondió a una solicitud realizada el viernes anterior por el fiscal general de la nación, Augusto Aras.

Moro, quien como juez condujo a prisión al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, anunció el viernes su renuncia después de que Bolsonaro destituyera al director general de la Policía Federal, Mauricio Valeixo. Durante el discurso en el que anunció su dimisión, el exjuez cuestionó la interferencia política del mandatario en el nombramiento de cargos técnicos, incluido el del director de la Policía Federal.

Según el magistrado, es posible abrir una investigación contra Bolsonaro ya que los hechos narrados por Moro se relacionan con el ejercicio del cargo del mandatario. Según la Constitución brasileña, el presidente no puede ser investigado por actos que hayan ocurrido fuera del ejercicio de su mandato.

“Los crímenes presuntamente cometidos por el presidente de la República, según lo informado por el entonces ministro de Justicia y Seguridad Pública, parecen mantener (...) una conexión íntima con el ejercicio del mandato presidencial”, argumentó De Mello en su decisión.

Varios delitos

La apertura de la investigación en el Tribunal Supremo tiene como objetivo esclarecer si Bolsonaro cometió un eventual delito de falsedad ideológica, coacción, prevaricación u obstrucción de Justicia, entre otros. En caso de que las acusaciones de Moro no se comprueben, la declaración del exministro puede constituir un delito de “denuncia calumniosa”.

Después de año y medio en el poder, Bolsonaro vive actualmente la mayor crisis política de su mandato, que se suma a la problemática que afronta por la pandemia del coronavirus, que ya deja más de 4.200 muertos y se acerca a los 70.000 casos confirmados.

A su reiterada insistencia en considerar a la COVID-19 como una “gripita”, lo que ya hacía cuestionar su gestión frente a la pandemia, se une la salida de dos de sus ministros “estrella”, en menos de diez días. Además de la renuncia el viernes pasado del exjuez Moro, ocho días antes tuvo lugar la salida del titular de la cartera de Salud Luiz Henrique Mandetta.

Relevo de Moro en Justicia

Precisamente este martes Bolsonaro ha anunciado como nuevo ministro de Justicia y Seguridad Pública al abogado y pastor evangélico André de Almeida Mendonça, en sustitución de Moro. La decisión fue publicada en el Diario Oficial, donde el mandatario también anunció el nombramiento de Alexandre Ramagen como nuevo director de la Policía Federal, en sustitución de Mauricio Valeixo, cuyo despido motivó la salida de Moro.

Mendonça, de 46 años, es un abogado que comenzó su carrera en la petrolera estatal, Petrobras, y que estuvo años trabajando en la AGU hasta que Bolsonaro le puso al frente de la misma. Además, cursó estudios teológicos hasta convertirse en pastor evangélico. De acuerdo con ‘Estadao’, cuenta entre sus virtudes que es “extremadamente leal”.

El nuevo ministro ha dado las gracias públicamente a Bolsonaro a través de Twitter. "Mi compromiso es seguir desarrollando el trabajo técnico que ha guiado mi vida. Cuento con el apoyo del pueblo brasileño. ¡Que Dios nos bendiga!", ha proclamado en su mensaje.

Ramagen, por su parte, era hasta ahora el director de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN). Entró en la Policía Federal en 2005 y, entre otras cosas, dedicó su carrera a la lucha contra el crimen organizado y la corrupción, llegando a formar parte del equipo de investigadores de 'Lava Jato'.

El diario brasileño destaca del nuevo jefe de la Policía Federal que pertenece al círculo de confianza de la familia Bolsonaro. Su relación con Carlos Bolsonaro, uno de los hijos del presidente, le habría facilitado el acceso al Palacio de Planalto como asesor y catapultado al frente de la ABIN, apunta ‘Estadao’.