Suecia propagó el coronavirus al resto de Escandinavia

La estrategia sueca contra el coronavirus llevó a que la infección se pudiera transmitir a otros países. Al menos esa es la conclusión de un nuevo estudio donde investigadores de la Universidad de Uppsala, entre otros, han analizado 71.000 muestras de pacientes.

El estudio, del que se hizo eco el martes la televisión pública SVT, describe cómo las cadenas de infección que se originan en Suecia en varios cientos de casos se han extendido a otros países. A pesar de las estrictas restricciones de viaje en Finlandia, el país se vio particularmente afectado, según el estudio.

Por el contrario, prácticamente no hubo exportación del virus de Finlandia a Suecia, según los investigadores. Creen que fueron los finlandeses que no estaban cubiertos por la prohibición de entrada finlandesa los que trajeron consigo la infección de Suecia cuando regresaron a su país de origen.

“Durante el primer año de la pandemia en curso, Suecia fue en realidad un exportador neto del virus sars-cov-2 a nuestros vecinos nórdicos”, explica John Pettersson, investigador del centro de ciencias de Zoonosis en la Universidad de Uppsala.

El estudio muestra que las cadenas de infección en Suecia han incluido más personas que en los países vecinos y, según los investigadores, existe la posibilidad de que el número de casos de coronavirus en Suecia y otros países nórdicos hubiera sido menor si Suecia hubiera optado por una estrategia más restrictiva. Un giro que acometió el pasado otoño con el cierre temprano de la hostelería y la limitación de las reuniones a ocho personas.

“No es improbable, pero se debe ser humilde ante el hecho de que puede haber factores que no hemos controlado y que también pueden haber afectado el resultado”, señala Pettersson.

El estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Uppsala, el Instituto Noruego de Salud Pública y la Universidad de Sídney en Australia, se presenta en la revista “Eurosurveillance” de la Agencia Europea de Control de Infecciones.

Sin bien el país nórdico no cerró en la primera ola de la pandemia fronteras, escuelas, bares o centros comerciales para apostar por el distanciamiento social, la higiene y la responsabilidad individual de sus ciudadanos, compartía los mismos objetivos que aquellos países que se decantaron por imponer el confinamiento o medidas más restrictivas de la vida social.

Criticada en el exterior y defendida en casa, la vía sueca contra el coronavirus creó malestar entre sus vecinos, que optaron por excluir a Suecia de la “burbuja nórdica”y mantener sus fronteras cerradas durante el verano de 2020 por la mayor incidencia de la pandemia.

Suecia, con una población total de unos 10,4 millones de habitantes, ha registrado hasta ahora 1,19 millones de casos y 15.107 muertos por la covid-19, con un índice de 146,75 fallecidos por 100.000 habitantes. La mortalidad sueca por coronavirus es tres veces mayor que la de Dinamarca y siete que la de Noruega y Finlandia.

• Suecia: 11.450 casos de coronavirus y 146 muertes relacionadas con Covid-19 por cada 100.000 personas.
• Dinamarca: 7333 casos y 48 muertes por cada 100.000 habitantes.
• Noruega: 4.276 casos y 18 muertes por cada 100.000 habitantes.
• Finlandia: 3.099 casos y 22 muertes por cada 100.000 personas.
• Islandia: 4.385 casos y 9 muertes por cada 100.000 personas.