Conflicto
El fútbol, hasta sus últimos extremos: polisarios celebran la derrota de Marruecos ante Argelia
Medios saharahuis creen que habrá más represión en el Sáhara tras el revés deportivo para Rabat
El fútbol llevado hasta sus últimos extremos. Medios polisarios celebraron la eliminación de Marruecos de la Copa Árabe a cargo de su eterno rival, ahora también en el plano militar y diplomático. El partido, celebrado en Doha, terminó con empate a dos y se resolvió en la tanda de penaltis.
Según las primeras noticias de las que se hace eco Ecsaharaui, en Dajla (antigua Villa Cisneros) y El Aaiún, en el Sáhara Occidental, se produjeron festejos en la calle por parte de los saharauis para celebrar la victoria argelina sobre la selección marroquí'.
“La última vez que los saharauis salieron a festejar una victoria de la selección argelina fue en verano de 2019 cuando éste se alzó con el campeonato. Por entonces, las fuerzas de ocupación marroquíes iniciaron una brutal campaña de represión”, asegura este medio.
El citado medio cree que la derrota deportiva va a conllevar “una nueva ola de represalia contra civiles saharauis”, que han salido a las calles de sus ciudades ocupadas “desafiando el régimen del terror para mostrar su apoyo a la selección argelina al grito de que ‘’la victoria argelina es la victoria del pueblo saharaui’'
Sin embargo, los medios marroquíes destcan el ambiente deportivo del partido. Según “L’Opinion’, “el partido estuvo también y sobre todo marcado por un juego limpio sin igual, sabiendo que muchos medios y analistas anticipaban roces entre los dos equipos dado que el partido se desarrolla en un contexto de tensiones extremas entre Rabat y Argel. Especulaciones que incluso empujaron a los organizadores a fortalecer el sistema de seguridad alrededor del estadio, en caso de que la situación se descarrile. Los simpatizantes de ambos bandos se recibieron calurosamente en las entradas del campo, impulsados por la misma pasión y afirmando una vez más la cohesión, hermandad y sólidos lazos entre los dos pueblos que los portavoces del régimen argelino intentan romper. A cualquier precio. . Si los jugadores de los dos equipos se saludaban y se disculpaban en caso de faltas durante este partido, no recomendado para pacientes cardíacos, los aficionados izaron las banderas de Marruecos y Argelia una al lado de la otra en las gradas con una sonrisa en el rostro. En este clima fraterno, los 90 minutos del tiempo reglamentario terminaron con un empate de gol por todas partes”.
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