Guerra

El Reino Unido de Boris Johnson se convierte en el país europeo más activo en la defensa de Ucrania

Las armas enviadas a Kyiv y el apoyo incondicional a Zelenski colocan al primer ministro británico como el líder en la defensa de la democracia en Europa frente al autoritarismo ruso

Boris Johnson con Volodimyr Zelenski en Kiev
Boris Johnson con Volodimyr Zelenski en KievUKRAINIAN PRESIDENTIAL PRESS SERAgencia EFE

El primer ministro británico Boris Johnson, el mismo que sacó a Reino Unido de la Unión Europea contra viento y marea dando un portazo a Bruselas, se ha puesto al frente del grupo de países que lidera la defensa de Europa frente a la agresión rusa. Es verdad que Francia y Alemania están suministrando armas a Kyiv, pero Londres, sin duda, lleva la iniciativa, y Johnson parece haberse convertido en el principal activista por la causa ucraniana, más incluso que el presidente de EEUU Joe Biden.

Con su papel estelar en la crisis de Ucrania, el “premier” británico no solo ha conseguido ensombrecer a los líderes de Francia y Alemania sino que ha apartado el intenso y molesto foco de luz que estropea su imagen por el escándalo del partygate”, dando una balón de oxígeno a su maltrecha popularidad entre los británicos.

Johnson ha visitado en dos ocasiones Ucrania desde que comenzó la guerra, mientras que Emmanuel Macron y Olaf Scholz lo hicieron la pasada semana por primera vez. El apoyo británico militar y político al presidente ucraniano Volomidyr Zelenski es inquebrantable, y su decidida apuesta para que Suecia y Finlandia puedan ingresar cuanto antes en la OTANha sido más rotunda que el de cualquier otro país.

Reino Unido también ha sido uno de los países que más rápido ha reforzado el flanco este de la OTAN tras el estallido de la guerra con el envío de soldados y barcos. Además, ha dicho que entregará más de 1.600 millones de euros en armas avanzadas para Ucrania.

Londres ha anunciado la donación a Ucrania de sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple M270 con municiones de precisión M31A1. Ha enviado más de 5.000 armas antitanque ligeras de próxima generación. Son los llamados Nlaws, diseñados para destruir tanques a corta distancia con un solo disparo. Otra de las piezas clave suministras a Kiev son “cientos” de misiles Brimstone, además de 120 vehículos blindados, incluidos los vehículos de patrulla Mastiff. El secretario de Defensa británico informó también del envío de “docenas” drones de carga pesada y cinco sistemas de defensa aérea, incluidos misiles Starstreak.

Reino Unido lidera la Joint Expeditionary Force, una fuerza militar conjunta al margen de la UE muy involucrada en la defensa de Ucrania, en la que participan además de Reino Unido países como Noruega, Dinamarca, Finlandia, Suecia, Islandia, Estonia, Letonia, Lituania y los Países Bajos. Para algunos, es el auténtico ejército europeo que la UE parece incapaz de poner en marcha.

El gran pero que desde Ucrania le ponen a la actuación de Londres en esta guerra es su deficiente política migratoria, que ha dejado a muchos refugiados ucranianos sin poder entrar en Reino Unido, nada que ver con la agilidad y la generosidad demostrada por la Unión Europea.

Mientras tanto, Johnson se centra en su papel de portavoz y avisa a los líder europeos que la guerra será larga y que los países occidentales deben asumir que Ucrania necesitará respaldo durante años para continuar siendo un Estado viable. Ucrania, dijo Johnson este fin de semana, debe “recibir armas, equipos, munición y entrenamiento a más velocidad que el invasor”, detalló el primer ministro, que el viernes anunció un programa de entrenamiento con la capacidad para formar hasta a 10.000 soldados cada 120 días.

Como escribe en The Guardian Simon Tisdall, “los acontecimientos recientes sin duda han recordado a los partidarios del Brexit más recalcitrantes que Europa es el territorio de Reino Unido, el vecino ineludible donde se encuentran los principales intereses nacionales” de los británicos. Para Tim Oliver, profesor de política británica y políticas públicas en la Universidad de Manchester, el protagonismo en la crisis ucraniana “reafirma el papel de gran potencia que Reino Unido ha estado buscando desde el final de la Segunda Guerra Mundial”.