Polémica

Rocky Macron o el punch de comunicación contra Putin

Al presidente francés le llueven las críticas por mostrar una «virilidad populista» en dos imágenes haciendo boxeo

Macron, practicando boxeo, ha sido comparado con Robert De Niro en "Toro Salvaje"
Macron, practicando boxeo, ha sido comparado con Robert De Niro en "Toro Salvaje"Soazig de la Moissonnière/Eliseo

Hace tiempo que es sabido que a Emmanuel Macron le gusta atizar al saco de boxeo cuando encuentra ratos libres entre sus funciones presidenciales. Hasta 45 minutos dos veces por semana. Lo contó la propia Brigitte Macron hace unos meses en Paris Match. En enero, Macron mostró un video de él mismo en el gimnasio con guantes de boxeo colgando de su espalda. Pero ahora se ha ido un paso más allá y la imagen del presidente francés de pugilato y la comunicación política pretendida con su difusión ha generado un intenso revuelo en Francia.

Todo parte de la fotógrafa oficial de Macron, Soazig de la Moissonière, quien ha publicado unas imágenes en su cuenta de Instagram en las que el mandatario sale peleando frente a un saco con camiseta negra, transpirando y con músculos tensionados y una expresión de máxima tensión en su rostro.

El momento de la publicación de estas instantáneas ha hecho su fácil relación con la actualidad para muchos usuarios en redes sociales y analistas políticos en medios de comunicación en Francia. Desde comentarios como «Un presidente combativo por Francia» o incluso comparar al presidente con Rocky Balboa hasta quienes han cuestionado si las fotos han sido retocadas o si llegan en un momento adecuado. Muchos se han atrevido a compararlo con Robert de Niro en el film Raging Bull (Toro salvaje).

Las referencias a las declaraciones de Macron sobre la guerra de Ucrania en los días anteriores han sido constantes en redes sociales. El presidente francés no ha descartado que se envíen tropas de Occidente a combatir a Ucrania y ha pedido a sus aliados europeos que no dejen ganar a Vladimir Putin. «Si Ucrania cae, nuestra seguridad está en juego», ha llegado a afirmar. En este sentido, muchos franceses hacían este jueves la interpretación geopolítica como tema de cafetería insinuando que el saco de boxeo representa a Putin y el espíritu de guerra que tiene Macron en estos momentos.

Tampoco han faltado quienes han acusado a la fotógrafa del mandatario de usar Photoshop para engrandecer los bíceps de Macron, algo que ya han desmentido desde la presidencia. Otros, especialmente desde la oposición de izquierdas, han criticado un estilo de comunicación política machista para ponerse a la altura de la virilidad tóxica de Putin. Éric Anceau, profesor de historia de la Universidad de Lorena, ha subrayado en X que las fotografías son «parte de la virilidad neopopulista que aprecian hoy ciertos líderes, empezando por el maestro del género (hasta ahora) Vladimir Putin».

Dos escenas boxeando que recordaron inmediatamente las de las vacaciones de Putin en Siberia, a caballo, con el pecho al aire, o haciendo judo, un deporte con el que ha ganado el cinturón negro cuando era espía de la KGB, o disparando un rifle de francotirador.

La diputada ecologista Sandrine Rousseau reaccionó escandalizada en X. «Esos códigos viriles hasta la sobredosis. Qué miseria de política. Qué derrota del progresismo. Y que indigencia de la comunicación política», ha sentenciado. Pero también ha habido críticas desde filas conservadoras. El diario Le Figaro fue lapidario. «La pose parece ventajosa, pero ha suscitado muchas burlas».

Lo que está claro es que el efecto de revuelo se ha conseguido. Una vez más con esa misma fotógrafa que en 2022 nos mostró a un Macron descamisado o a un Macron en sudadera a altas horas de la madrugada gestionando una crisis. De la Moissonnière, imaginera presidencial desde 2016, es conocida en toda Francia por haber llevado al Eliseo un tipo de storytelling visual que se acerca mucho al que practicaba Pete Souza con los Obama. Ninguno de los elementos que esta fotógrafa incluye en sus imágenes es producto del azar. Momentos distendidos salpicados de puntos de controversia que generan debates virales.