La estrategia de un senador de EEUU para frenar el poder militar de China "sin precedentes"

El senador republicano Roger Wicker, en un artículo para The New York Times, ha sembrado un reguero de dudas sobre la capacidad de las fuerzas armadas estadounidenses. Wicker, del Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos, ha asegurado que el ejército de su país corre el riesgo de estar mal equipado y armado ante algunas de las amenazas globales más peligrosas desde la Segunda Guerra Mundial. "Luchamos por construir y mantener barcos, nuestra flota de cazas es peligrosamente pequeña y nuestra infraestructura militar está obsoleta. Mientras tanto, los adversarios de Estados Unidos refuerzan su ejército y se vuelven más agresivos", asegura el senador

Según Wicker, China está llevando a cabo una modernización histórica de sus tropas, aprovechando las vulnerabilidades estadounidenses, mientras que Rusia está movilizando a la sociedad para prepararse para un conflicto a largo plazo en Europa. En Oriente Medio, Irán está ampliando su red de influencias para ganar peso específico en la región.

El senador destaca que estas tres naciones (China, Rusia e Irán) están cooperando cada vez más en una operación "sin precedentes" para evitar un "siglo XXI liderado por Estados Unidos". "Este futuro teórico podría llegar antes de lo que piensa la mayoría de los estadounidenses. Según la creciente opinión de los expertos, dentro de unos años podríamos encontrarnos en un estado de extrema vulnerabilidad", advierte el autor del artículo.

En China, el líder del país, Xi Jinping, "ha orquestado una modernización militar histórica destinada a explotar las debilidades del ejército estadounidense. Ha superado a la Armada estadounidense en tamaño de flota, ha construido uno de los mayores arsenales de misiles del mundo y ha realizado grandes avances en el espacio", escribe Wicker.

El liderazgo militar estadounidense ya está teniendo que tomar "decisiones imposibles". La Marina "ha tenido dificultades para financiar adecuadamente nuevos buques, el mantenimiento constante y la compra de municiones, pero no ha logrado abordar eficazmente las tres cuestiones", añade el senador, quien sostiene que "en las últimas cuatro décadas, el arsenal estadounidense ha contribuido a garantizar la paz, pero la negligencia política ha provocado su atrofia a medida que las máquinas de guerra de otras naciones se han puesto en marcha. La mayoría de los estadounidenses no se dan cuenta de que el espectro de los conflictos entre grandes potencias ha resurgido".

A su juicio, EEUU puede encontrarse en una situación de "extrema vulnerabilidad" en pocos años, "según un consenso cada vez mayor de expertos", justo cuando el ejército de China "alcanza su mejor momento".

El PIB en Defensa que EEUU necesita

Dos de los tres programas de modernización nuclear más importantes no cuentan con fondos suficientes y corren el riesgo de sufrir retrasos. Al Pentágono le faltan 180.000 millones de dólares para mantenimiento básico, desde cuarteles hasta campos de entrenamiento, lo que sólo demuestra la debilidad de Estados Unidos ante sus adversarios, dijo el senador.

En su opinión, la situación se puede cambiar. Pero para ello, Estados Unidos debe aumentar el gasto en defensa del 2,9 al 5% del PIB. “ La reconstrucción del poder estadounidense tendrá un coste. Pero librar una guerra (y peor aún, perderla) es mucho más caro ”, subraya Wicker.