Política

Represión en Nicaragua

El asalto de Ortega contra los críticos de su Gobierno en Nicaragua

La Policía nicaragüense saquea a medios y ONG ilegalizados

Empleados de la revista independiente «Confidencial» evalúan los daños del saqueo en sus oficinas de Managua
Empleados de la revista independiente «Confidencial» evalúan los daños del saqueo en sus oficinas de Managualarazon

La Policía nicaragüense saquea a medios y ONG ilegalizados.

Finalmente el presidente Daniel Ortega se ha convertido en «una bestia feroz», un espejo del dictador Anastasio Somoza, el mismo que derrocó en su época como guerrillero sandinista. También se asemeja a Nicolás Maduro, su par venezolano, en métodos y forma. Quizás incluso lo supera como «villano de la región». En cualquier caso, el mandatario nicaragüense ha decidido tomar la senda más salvaje para perpetuarse en el poder: la represión y la mordaza. Tras asesinar a través de la Policía y los escuadrones de la muerte a estudiantes y opositores, Ortega carga contra las voces críticas.

Después de la cancelación de nueve ONG por parte del Parlamento nicaragüense –controlado por el oficialismo–, otras instituciones y un grupo de medios críticos con el Gobierno de Ortega han sido allanados sin orden judicial. Según el Parlamento, las ONG suspendidas «cometieron actos ilícitos», «violentaron el orden público» y actuaron «en actividades que no corresponden con los fines para los que fueron constituidas». Además, en un claro atropello a la libertad de expresión, el régimen de Ortega realizó un operativo en la noche del jueves en el cual saqueaba la redacción de las revistas «Confidencial» y «Niú» y los programas «Esta Semana» y «Esta Noche», todos críticos del Gobierno nicaragüense. El personal de seguridad de la redacción de «Confidencial» detalló que un grupo de policías fuertemente armados irrumpió en el edificio cerca de la medianoche y forzaron la entrada. Pero eso no fue todo: los policías que participaron en el operativo ilegal encañonaron al personal para obligarlos a colaborar en el asalto. El director del semanario, Carlos Fernando Chamorro, instó a las autoridades a reponer lo secuestrado: «Exijo a la Policía que devuelva todos los equipos y documentos que saquearon en la redacción de 'Confidencial' y 'Esta Semana'. Es un ataque deliberado contra la prensa independiente. ¡No nos callarán!».

SOS Nicaragua España condenó ayer «la nueva ola represiva que sacude Nicaragua». «Esta nueva escalada de violencia de la dictadura en Nicaragua implica mayores retrocesos en los derechos civiles y políticos en nuestro país». Desde abril, las detenciones ilegales se han convertido en una de las principales preocupaciones de las organizaciones de derechos humanos locales e internacionales. Los presos ascienden a unos 600. El orteguismo confirmó que existen alrededor de 204 «presos políticos». Nicaragua es hoy una bomba de relojería. Según distintas organizaciones, son más de 500 las víctimas mortales producto del estallido social que se desató hace ocho meses. El Gobierno reconoce 200 muertes.