Elecciones en EE UU
Elon Musk riega la candidatura presidencial de Trump con 75 millones de dólares
El hombre más rico del mundo se coloca como uno de los principales financistas de la campaña del republicano
Elon Musk ha donado casi 75 millones de dólares para la campaña de Donald Trump en su intento de recuperar la Casa Blanca. El hombre más rico del mundo busca influir a base de billetes en el resultado de las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre en Estados Unidos. El magnate realizó varias donaciones multimillonarias durante el tercer trimestre al comité de acción política (PAC) llamado America Pac, según un informe federal publicado el martes, lo que le dio al grupo un enorme presupuesto para apoyar la candidatura de reelección del expresidente. El grupo ha gastado ya más de 96 millones de dólares en impulsar a Trump, según la organización independiente sin fines de lucro OpenSecrets, y alrededor de 10 millones más en ayudar a los republicanos en las elecciones al Congreso.
Propietario de la red social X y director ejecutivo de Tesla, Musk respaldó a Trump en julio después de que el candidato republicano sobreviviera a un intento de asesinato en un mitin en Butler, Pensilvania. De hecho, el magnate acompañó a Trump en el escenario en el mismo lugar para un mitin a principios de octubre.
Los detalles sobre la magnitud de la donación de Musk –que lo convierte en uno de los mayores apoyos financieros de Trump en este ciclo electoral– llegan en un momento en que el republicano intenta cerrar la brecha de recaudación de fondos con su rival demócrata, Kamala Harris, en una de las contiendas más ajustadas que se recuerdan por la Casa Blanca.
Trump también ha recibido un importante respaldo financiero de Miriam Adelson, esposa del difunto magnate de los casinos Sheldon Adelson, quien donó 95 millones de dólares a su super PAC pro-Trump, Preserve America, según otro informe presentado el martes.
Musk, que llegó a apoyar a los demócratas en elecciones anteriores, ha descrito estos comicios como su última esperanza para la democracia estadounidense. El magnate ha llegado a decir que los inmigrantes ilegales tomarían el control del país si Harris ganara. «Si Trump no gana esta elección, será la última elección que tendremos», expresó Musk la semana pasada en el programa del comentarista republicano Tucker Carlson en su plataforma X. El multimillonario añadió que estaba «totalmente comprometido» con el expresidente, que le ha prometido liderar una comisión que auditaría el gasto federal y las regulaciones en su Administración.
Musk también ha ridiculizado al presidente Joe Biden y a la vicepresidenta Harris ante sus más de 200 millones de seguidores en el antiguo Twitter, red en cuyos contenidos está imprimiendo un giro cada vez más brusco hacia las posiciones de la extrema derecha.
Musk, con todo, no es el único. Otros donantes importantes al America Pac de Musk incluyen a los empresarios tecnológicos multimillonarios Cameron y Tyler Winklevoss; el inversionista temprano de Tesla, Antonio Gracias; el cofundador de Palantir Technologies, Joe Lonsdale; el socio de Sequoia, Shaun Maguire; y Doug Leone, antiguo socio gerente de la firma.
America Pac ha contratado encuestadores en estados clave como Pensilvania y Míchigan. Su sitio web afirma que el pago comienza en 30 dólares por hora. El grupo también está ofreciendo a las personas 47 dólares –el próximo presidente de Estados Unidos será el número 47– «por cada votante registrado que refiera y firme una petición comprometiéndose a apoyar la Primera y Segunda Enmienda» de la Constitución de Estados Unidos, que protegen la libertad de expresión y el derecho a portar armas, respectivamente.
Musk se ha convertido en un crítico cada vez más vocal de lo que considera la política «woke». En julio, dijo que trasladaría sus empresas X y SpaceX a Texas después de que California aprobara una ley que prohíbe a los distritos escolares exigir al personal que notifique a los padres sobre un cambio en la identidad de género de un niño. También ha mostrado su descontento con la Administración de Biden y Harris, la cual considera hostil hacia sus negocios, a pesar de que su patrimonio neto ha crecido diez veces entre 2020 y 2024, alcanzando los 246 mil millones de dólares, según la revista Forbes.
En 2021, el primer año de Biden en el cargo, la Casa Blanca ignoró a Tesla en un evento que incluía a fabricantes de vehículos eléctricos y al sindicato United Auto Workers. Tesla, profundamente antisindical, no fue invitada. Varios organismos federales también están investigando las empresas de Musk, incluidas investigaciones del Departamento de Justicia y de la Comisión de Bolsa y Valores sobre las afirmaciones de Tesla sobre sistemas de asistencia al conductor.
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