Catástrofe natural

Las espectaculares imágenes del tifón "Ragasa" que está arrasando regiones enteras de Asia

El supertifón ha provocado 14 muertos en Taiwán y ha paralizado Hong Kong, con un nivel de alerta máximo de 10. Ahora se dirige al sur de China

El tifón Ragasa llegará hoy a Hong Kong tras su paso por Taiwán, donde ha dejado más de diez muertos
Imágenes del tifón Ragasa a su paso por Taiwán, donde ha dejado 14 muertosRITCHIE B. TONGOAgencia EFE

En una operación masiva para proteger vidas, las autoridades chinas han evacuado a casi dos millones de personas en Guangdong, el núcleo industrial del sur, ante la llegada del supertifón Ragasa, el ciclón tropical más potente de 2025. La tormenta, con vientos sostenidos de 185 km/h y ráfagas que superan los 230 km/h —equivalentes a un huracán categoría 5—, ha paralizado ciudades, cerrando escuelas, fábricas y sistemas de transporte en una docena de municipios. Los pronósticos alertan de inundaciones masivas y deslizamientos en una región densamente poblada. En Taiwán, ya dejó una estela de destrucción, con 14 fallecidos tras el colapso de un lago en Hualien que desató una avalancha de agua, arrasando comunidades como un tsunami y forzando la evacuación de más de 7.600 personas, respaldadas por miles de militares. Hong Kong, bajo alerta nivel 10, quedó también inmovilizado este miércoles: calles vacías, 700 vuelos cancelados y residentes atrincherados frente a vientos que derriban vegetación y estructuras. Este fenómeno meteorológico de escala colosal, pone a prueba la resiliencia de estas regiones frente a la creciente intensidad de los ciclones en el Pacífico.

Este monstruo atmosférico, alimentado por las cálidas aguas del Pacífico Occidental —con temperaturas superficiales del mar superiores a los 28°C, ideales para la intensificación ciclónica—, representa un paradigma de los eventos extremos que los meteorólogos asocian al cambio climático antropogénico. Su ojo bien definido, rodeado por un muro nuboso convectivo que genera tormentas eléctricas intensas y precipitaciones torrenciales de hasta 500 mm en 24 horas, ha barrido ya Filipinas y Taiwán, dejando un rastro de destrucción que hace replantear las estrategias de resiliencia en la región del Mar de China Meridional.

Super Typhoon Ragasa kills 14, dozens missing in Taiwan floods
Super Typhoon Ragasa kills 14, dozens missing in Taiwan floodsRITCHIE B. TONGOAgencia EFE
Super Typhoon Ragasa kills 14, dozens missing in Taiwan floods
Super Typhoon Ragasa kills 14, dozens missing in Taiwan floodsRITCHIE B. TONGOAgencia EFE

La evacuación en Guangdong, una provincia con más de 125 millones de habitantes y un PIB equivalente más o menos al de España, no es un acto de pánico sino una respuesta calculada ante el modelo de pronóstico numérico del Servicio Meteorológico Nacional de China, que predijo el momento de impacto costero entre las ciudades de Yangjiang y Zhanjiang la tarde del miércoles. Imágenes satelitales de la NASA, compartidas por astronautas en órbita, mostraron la espiral simétrica de Ragasa como un vórtice colosal, con bandas externas azotando la costa con oleaje de hasta 10 metros y vientos que derriban estructuras no reforzadas. En Hong Kong, los paseos marítimos han sido azotados por olas "más altas que farolas", según testigos locales, mientras el aeropuerto internacional cancelaba cientos de vuelos y las estanterías de supermercados se vaciaban en un frenesí preventivo. Esta metrópoli financiera, acostumbrada a tifones pero pocos de esta magnitud, activó la alerta T10, la máxima en su escala, paralizando las escuelas, el transporte y confinando a sus 7,5 millones de residentes en sus hogares.

Super Typhoon Ragasa kills 14, dozens missing in Taiwan floods
Super Typhoon Ragasa kills 14, dozens missing in Taiwan floodsRITCHIE B. TONGOAgencia EFE

Pero es en Taiwán donde la catástrofe ha cobrado un rostro humano mas desgarrador. El premier Cho Jung-tai ordenó una investigación inmediata sobre las fallas en las órdenes de evacuación en el condado de Hualien, una zona escarpada y turística donde un lago de barrera —formado por acumulación de sedimentos y rocas tras deslizamientos inducidos por lluvias previas— reventó el martes por la tarde. Este fenómeno hidrometeorológico, conocido como outburst flood o inundación por rotura de presa natural, liberó aproximadamente 60 millones de toneladas de agua en un torrente que arrasó Guangfu, un pueblo de apenas 9.000 habitantes. "El agua llegó como un tsunami", relató un cartero local, quien se refugió en el segundo piso de su oficina postal sólo para encontrar su coche incrustado en el salón de su casa al regresar. Las autoridades taiwanesas reportan 14 fallecidos confirmados, 18 heridos y 124 desaparecidos, con equipos de rescate desplegados en vehículos blindados para sortear el lodo espeso que obstruye las calles.

Super Typhoon Ragasa hits southern China
Super Typhoon Ragasa hits southern ChinaANDRES MARTINEZ CASARESAgencia EFE

Guangfu, ahora un paisaje de barro y escombros, ilustra la vulnerabilidad de las regiones montañosas ante los efectos secundarios de un supertifón. Las precipitaciones orográficas —intensificadas por el levantamiento forzado del aire húmedo sobre las cordilleras— generaron acumulaciones que saturaron el suelo, desencadenando corrimientos de tierra que bloquearon ríos y crearon el lago fatal. A pesar de que Taiwán cuenta con un sistema de alerta temprana robusto, basado en radares Doppler y modelos como el WRF (Weather Research and Forecasting), residentes como la concejala Lamen Panay critican la insuficiencia de las instrucciones: "Se nos dijo que evacuáramos verticalmente, subiendo a pisos superiores, pero esto no resuelve una inundación de esta escala". De los 5.200 residentes a los que indicaron que se refugiasen, casi el 60% de la población local, muchos optaron por quedarse en casa, subestimando el riesgo. Ahora, soldados distribuyen agua y fideos instantáneos puerta a puerta, mientras drones y helicópteros escanean el área en busca de sobrevivientes.

China Asia Typhoon
China Asia TyphoonASSOCIATED PRESSAgencia AP

Antes de azotar Taiwán, Ragasa ( que en tagalo se traduce como ‘revuelto’),dejó otro rastro letal en Filipinas. Tres personas perecieron en el norte del archipiélago, sepultadas por deslizamientos e inundaciones que anegaron barrios enteros bajo metros de agua fétida. Mientras rescatistas evacuaban a miles en la oscuridad, la ira estalló contra el presidente Ferdinand “Bongbong” Marcos Jr., acusado de saquear fondos destinados a salvar vidas. En ciudades del norte, cientos de desplazados tomaron las calles, gritando: “¡No hay diques, no hay refugios, solo mentiras!”. En Cagayán, un líder comunitario denunció promesas vacías, mientras las protestas entorpecían los rescates, reflejando una desconfianza visceral hacia un gobierno manchado por la corrupción.

Typhoon Ragasa strikes under signal 10 in Hong Kong
Typhoon Ragasa strikes under signal 10 in Hong KongMAY JAMESAgencia EFE

Desde que Marcos Jr. asumió el poder en 2022, Filipinas dilapidó 545 mil millones de pesos (unos 8.000 millones de euros) en 9.855 proyectos de control de inundaciones, pero el 20% quedó en manos de solo 15 contratistas, muchos sin planos ni avances. Proyectos como el dique inconcluso de Calumpit, Bulacán, son un insulto para los filipinos, que ven cómo miles de millones se esfuman en los bolsillos de políticos y sus allegados, quienes alardean de viajes a Europa y moda de lujo. Marcos Jr., heredero de un apellido sinónimo de latrocinio desde la dictadura de su padre, promete auditorías y “chequeos de estilo de vida”, pero la calle no le cree. Exigen cárcel inmediata para los culpables. El escándalo ha sacudido el Congreso, con cambios de liderazgo en el Senado y la Cámara. Expertos advierten que sin castigo, la rabia crecerá, y Marcos, el mayor “nepo baby” del país, no podrá apagar el fuego que él mismo aviva.

Hong Kong Asia Typhoon
Hong Kong Asia TyphoonASSOCIATED PRESSAgencia AP

Mientras Ragasa se debilita ligeramente al interactuar con masas de aire continental más seco —un proceso conocido como fricción terrestre que reduce la velocidad de los vientos—, los meteorólogos advierten que mantendrá fuerza de tormenta tropical al tocar tierra, con potencial para marejadas ciclónicas de hasta 3-5 metros en la bahía de Guangdong. Esto amenaza infraestructuras críticas, como puertos y refinerías, en una región que representa el 10% del PIB chino.

Super Typhoon Ragasa hits southern China
Super Typhoon Ragasa hits southern ChinaANDRES MARTINEZ CASARESAgencia EFE

Esta crisis no es aislada: el Pacífico Occidental ha visto un aumento del 15% en la intensidad media de tifones desde 1970, según datos del IPCC, vinculado al ascenso de 0,2°C por década en las temperaturas oceánicas. Gobiernos como el chino, con su red de estaciones meteorológicas automatizadas y satélites, han mejorado la predicción, pero la evacuación masiva de estos días subraya la brecha entre ciencia y acción comunitaria. En Taiwán, la investigación del premier busca "descubrir la verdad" sin culpar, pero urge reformas: alertas obligatorias, mapeo de riesgos geológicos y educación sobre evacuación horizontal en zonas propensas.

Mientras China se prepara para el impacto, "la isla rebelde" busca a sus desaparecidos y Filipinas enfrenta tanto el lodo como la ira social, el resto del mundo observa un recordatorio impactante de la fragilidad ante un clima sumamente alterado.