Guerra

Tres muertos en ataque de un dron ucraniano contra base aérea rusa

Kyiv va a pedir al Consejo de Seguridad de la ONU que excluya a Moscú como miembro permanente por su campaña militar ilegal en su territorio

Mientras Rusia continúa bombardeando la infraestructura energética de Ucrania, otro ataque en su aeródromo militar a 600 kilómetros de la frontera sirve como recordatorio de que su oponente es capaz de apuntar a objetos en lo profundo de su territorio.

Tres soldados rusos murieron después de una explosión en el aeródromo militar “Engels” en Saratov anoche. Según el Ministerio de Defensa ruso, fueron asesinados por fragmentos de un dron que fue derribado. Fuentes no oficiales de Rusia afirman que un incendio envolvió unos 120 metros cuadrados del aeródromo y que cuatro soldados también resultaron heridos. Rusia insiste en que ningún avión resultó dañado.

El aeródromo alberga bombarderos estratégicos Tu-95 y Tu-160 que Rusia emplea para destruir la red eléctrica de Ucrania. Dos de ellos resultaron dañados en el ataque anterior a principios de este mes cuando también fue atacado otro aeródromo militar en Ryazan. “Engels” es una de las pocas, si no la única, base donde estos aviones pueden recibir servicio completo.

Al igual que en el caso anterior, Ucrania no ha admitido oficialmente haber llevado a cabo el ataque, aunque no hay duda de que estuvo involucrada. No hay información incontrovertible sobre qué armas pudo haber utilizado, aunque algunas fuentes afirman que los drones Tu-141 modernizados de la época soviética pueden haber sido utilizados para el ataque. En cualquier caso, el ataque repetido demuestra la incapacidad de Rusia para proteger sus objetivos militares de importancia estratégica en las profundidades de su territorio.

Analistas ucranianos, como Sergiy Grabskyi, subrayan que la cantidad de bombarderos estratégicos que tiene Rusia es limitada y no se puede reponer rápidamente ya que su producción es extremadamente complicada y costosa. El anterior ataque ucraniano redujo en 8 la cantidad de misiles que Rusia puede lanzar contra Ucrania. Por lo tanto, Grabskyi espera que tales ataques continúen, ya que es probable que los socios del país le proporcionen las armas de largo alcance necesarias en el futuro si aún no lo han hecho. El analista explica que puede ser más lógico disminuir la capacidad de Rusia para atacar a Ucrania que permitir que el sistema energético del país sea completamente destruido.

Las autoridades ucranianas indican que a Rusia le quedan suficientes misiles para dos o tres ataques masivos. Aún así, está produciendo misiles como “Kalibr” y X-101 mientras también busca obtener misiles balísticos de Irán, informa Yuriy Ignat, el portavoz de las Fuerzas Aéreas. También expresó la esperanza de que algunos pilotos rusos, que participaron en los ataques contra Ucrania, pudieran haber resultado heridos o muertos en el evento. Ignat también recordó que un avión Mig-31k, capaz de transportar misiles “Kinzhal”, se incendió y resultó dañado a finales de la semana pasada en Bielorussia.

Mientras tanto se ha advertido a los ucranianos que es probable que se produzca otro gran ataque con misiles y drones rusos en los próximos días. “Solo quedan unos pocos días en este año”, dijo Volodimir Zelenski en su discurso de video nocturno el domingo por la noche. “Debemos ser conscientes de que nuestro enemigo intentará hacer que este tiempo sea oscuro y difícil para nosotros”.

Se siguen aplicando cortes de energía de emergencia en toda Ucrania mientras se repara su red eléctrica dañada. Sus grandes ciudades de Kyiv, Lviv, Dnipro y Odesa se ven especialmente afectadas. En total, Rusia ha lanzado al menos 9 ataques masivos con misiles en los últimos meses, mientras que los ataques más pequeños continúan todos los días.

Mientras gran parte de Ucrania celebraba la Navidad el domingo, Rusia lanzó 40 ataques con cohetes contra decenas de localidades en las regiones de Donetsk, Lugansk, Jarkiv, Jerson y Zaporiyia, informó el lunes el Estado Mayor del ejército ucraniano.

El combate acalorado ha continuado en Mariinka y Bajmut en la región de Donetsk y algunas áreas en Lugansk. En Bajmut, unos 90 soldados rusos perdieron la vida solo en un dia en 28 enfrentamientos directos, mientras que se registraron más de 200 bombardeos. Sin embargo, la intensidad de los combates puede estar a punto de disminuir debido a las enormes pérdidas sufridas por las tropas rusas, especialmente sus mercenarios “Wagner”, que representan su principal fuerza de combate en Bajmut. Los analistas señalan que si bien Rusia ha podido avanzar lentamente en el área, su ritmo se ha desacelerado en los últimos meses.

Frente a la continua agresión rusa, Ucrania ha pedido a los estados miembros de la ONU que “priven a Rusia de su condición de miembro permanente del consejo de seguridad de la ONU y la excluyan de la ONU”. Si bien Ucrania ha subrayado durante mucho tiempo que Rusia ha violado el estatuto de la ONU con su invasión y crímenes de guerra, esta vez el argumento es más de naturaleza técnica, ya que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania argumenta que Rusia usurpó el asiento de la Unión Soviética en el Consejo de Seguridad tras la disolución del estado sin someterse a un procedimiento formal de incorporación.

El ministro Dmytro Kuleba subrayó que en los círculos diplomáticos se está discutiendo la necesidad de eliminar el poder de veto que Rusia ha utilizado para bloquear las resoluciones del Consejo de Seguridad sobre su invasión de Ucrania. Kyiv también recordó que tres décadas de presencia “ilegal” de Rusia en la ONU “han estado marcadas por guerras y tomas de territorios de otros países”.