El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos ha emitido una advertencia sobre el aumento de inhibidores de señales de fabricación china en el país, lo que representa una amenaza para la seguridad pública y la aviación civil. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) ha observado un aumento de aproximadamente el 830 % en las incautaciones desde 2021, a pesar de los intentos de las empresas chinas de eludir las inspecciones.

Los bloqueadores de señales pueden usarse para interrumpir una variedad de canales de radiofrecuencia y representar una amenaza para la respuesta a emergencias, la aplicación de la ley y la infraestructura crítica.

Los inmigrantes ilegales sudamericanos interrumpieron las llamadas a la policía local durante invasiones de casas o robos a bancos en Florida, Illinois, Ohio, Pensilvania, Texas, Vermont y Virginia. Inmigrantes ilegales en todo el país, señala el citado departamento, han utilizado inhibidores de señales para interferir las comunicaciones durante operativos policiales en delitos peligrosos.

"Bajo la vigilancia de la CBP, la seguridad nacional comienza en los puertos estadounidenses. Mientras los fabricantes chinos intenten contrabandear inhibidores de señales, seguiremos incautando estas herramientas terroristas. El presidente Trump y la secretaria Noem siempre protegerán la infraestructura crítica y las fuerzas del orden de Estados Unidos", afirmó un portavoz. Una ley federal estadounidense ya prohíbe la importación, operación, comercialización o venta privada de cualquier equipo de señales que interfiera con las comunicaciones de las fuerzas del orden, el GPS o el radar.