Política

Egipto

Israel y Hamas pactan un frágil alto el fuego

Las fuerzas especiales israelíes mataron el domingo a un jefe militar de las Brigadas Ezedín Al Qasam, brazo armado de Hamas
Las fuerzas especiales israelíes mataron el domingo a un jefe militar de las Brigadas Ezedín Al Qasam, brazo armado de Hamaslarazon

Las organizaciones islamistas han lanzado 460 cohetes e Israel ha atacado 160 objetivos en 24 horas.

Tras algo menos de dos días de duros enfrentamientos entre Israel y la organización islamista Hamas a ambos lados de la frontera entre Israel y Gaza, se anunció ayer al anochecer un alto el fuego. Las primeras informaciones sobre el cese de las hostilidades surgieron en la cadena qatarí Al Jazira y poco después se publicó un comunicado oficial del comando conjunto de las facciones armadas palestinas en Gaza, en el que participan tanto Hamas como la Yihad Islámica y los Comités de Resistencia Popular, entre otros. «La resistencia se compromete a cumplirlo, por petición de Egipto, si el enemigo lo respeta», decía el comunicado, en referencia, primero, a ellos mismos –los grupos armados– y luego, a Israel.

El Gobierno israelí no publicó ningún comunicado formal aceptando el alto el fuego, pero el gabinete de seguridad resolvió, tras siete horas de reunión, «dar a las Fuerzas de Defensa de Israel instrucciones para continuar actuando según sea necesario». Eso indicaba que se dejaba la puerta abierta tanto a la eventualidad de una escalada como al retorno a la calma. Poco después, medios locales señalaron que fuentes allegadas al Gobierno hebreo habían aceptado la mediación egipcia para intentar rebajar la escalada. «Un solo mortero puede arruinar todo», comentó un alto oficial del Ejército, mientras un ministro no identificado señaló que «todo depende de los hechos en el terreno». En otras palabras, estaba determinando que si Hamas no dispara, Israel no ataca. Esto fue criticado por algunos miembros de la coalición y también por la oposición, que denunciaron que «estamos dejando que Hamas decida cuándo se dispara y cuándo no».

En la ciudad de Sderot, a un kilómetro de la frontera con Gaza, que fue ya en 2001 blanco de los cohetes de Hamas, numerosos habitantes salieron a las calles a manifestarse contra el Gobierno. Furiosos, prendiendo fuego a neumáticos y gritaron consignas contra el primer ministro, Benjamin Netanyahu, acusándolo de permitir «que Hamas nos tome de rehenes». Netanyahu se ha visto obligado a defenderse de las críticas por haber dejado entrar a la bloqueada Gaza 15 millones de dólares de Catar para pagar a 23.000 funcionarios palestinos, como parte de los acuerdos para avanzar en una tregua de larga duración y aliviar la situación económica.

Pero fuentes políticas ponían ayer el énfasis en la petición explícita del presidente egipcio Al Sissi a Israel de dar una oportunidad a un alto el fuego en la franja. Según se informó, todos los jefes de los servicios de seguridad que participaron en la reunión –el jefe del Ejército, el jefe del Shin Bet que tiene a su cargo la lucha interna contra el terrorismo, el jefe del Mossad y del Consejo de Seguridad Nacional–, acordaron la necesidad de aprobarlo.

Israel responde que la agresión fue de Hamas, que disparó 460 cohetes en algo más de un día hacia blancos civiles en Israel, mientras que la Fuerza Aérea hebrea respondió atacando 160 posiciones militares de Hamas. El sistema defensivo «Cúpula de Hierro» logró interceptar más de cien de los cohetes antes de que impacten en zonas pobladas. Aun así, más de 20 cayeron en casas particulares o en medio de poblados, causando serios daños, matando a una persona en Ashkelon (un palestino de Cisjordania que trabajaba en Israel) y dejando a más de cien heridos.

Israel sostiene que su respuesta se concentró únicamente en blancos de Hamas y Yihad Islámica, procurándose inclusive alertar de antemano a residentes de barrios en los que se iba a atacar instalaciones de Hamas, para minimizar el riesgo de civiles muertos. Los palestinos informaron de que tuvieron cuatro muertos, uno de ellos un civil. Los demás eran, al parecer, miembros de células que estaban por lanzar cohetes y fueron neutralizadas desde el aire por Israel. Desde el lunes por la tarde, Israel atacó 160 blancos de los grupos terrorista, señalando el portavoz militar que cuatro de ellos eran «de valor estratégico».