Jornada sobre migraciones: Giorgia Meloni defiende su visión en el Mediterráneo

La cumbre de líderes de todo el Mediterráneo reunida este domingo en Roma por Giorgia Méloni trazó las líneas generales de un fondo para financiar proyectos de inversión y control de fronteras, con el objetivo a medio plazo de regular mejor los flujos migratorios.

En el origen de esta conferencia que reúne a los líderes de una veintena de países, Giorgia Méloni pretende promover un nuevo modo de cooperación entre países de inmigración y países de emigración, siguiendo el modelo del acuerdo firmado por la UE con Túnez para frenar la llegada de inmigrantes al Viejo Continente.

Tras medio día de conversaciones, la primera ministra italiana de extrema derecha anunció la creación de un fondo que se complementará con una primera conferencia de donantes, cuya fecha no ha sido fijada, una iniciativa a la que Emiratos Árabes Unidos ya ha aportado 100 millones de euros. Si de la conferencia no ha surgido otra medida concreta, “es el comienzo de un largo proceso”, con el lanzamiento del “proceso de Roma” para el que ha fijado las prioridades.

Amplia cooperación

“Lucha contra la inmigración ilegal, gestión de los flujos de inmigración legal, apoyo a los refugiados y, sobre todo, lo más importante, de lo contrario todo lo que haremos será insuficiente, una amplia cooperación para apoyar el desarrollo de África, y particularmente de los países de origen” de los migrantes, detalló.

Según ella, las "líneas prioritarias de financiación deben ser sobre todo inversiones estratégicas e infraestructuras porque es la forma más sostenible de hacer cooperación".

El punto culminante de esta conferencia fue el anuncio por parte del presidente de los Emiratos Árabes Unidos de la contribución de su país con un monto de 100 millones de dólares para apoyar proyectos de desarrollo en países afectados por el fenómeno de la migración irregular y las iniciativas planteadas en el “proceso de Roma”.

La llegada de migrantes

Según la ONU, más de 100.000 migrantes llegaron a Europa en los primeros seis meses de 2023 por vía marítima, desde las costas del norte de África, Turquía y Líbano. Eran poco más de 189.000 en 2022.

Bruselas y Roma firmaron la semana pasada un memorando de entendimiento con el presidente tunecino que prevé, en particular, una ayuda europea de 105 millones de euros destinada a evitar la salida de barcos de inmigrantes y luchar contra los traficantes. La UE quería negociar asociaciones similares con Egipto y Marruecos.