Muro antidrones
El muro antidrones que quiere construir Europa requeriría de millones de aparatos, según una fuente ucraniana
El proyecto, todavía en fase de estudio, contempla además la combinación de medios cinéticos y de guerra electrónica
La creación de un sistema de defensa aérea no tripulada que cubra el flanco oriental de la Unión Europea requeriría una cantidad ingente de recursos tecnológicos. Según información trasladada por Kiev a socios europeos, inspirada en la tecnología que actualmente utiliza Ucrania, serían necesarios “millones de drones interceptores” para poner en marcha un muro de protección de este tipo.
Fuentes comunitarias citadas por ANSA, la principal agencia de noticias italiana, explican que los especialistas ucranianos han planteado estimaciones iniciales sobre su despliegue. Solo Lituania, que comparte alrededor de 900 kilómetros de frontera con Rusia y Bielorrusia, necesitaría unos tres millones de drones para garantizar la cobertura de su espacio aéreo.
Los estudios en marcha no se limitan al número de dispositivos. Bruselas y las capitales europeas analizan qué tecnología resultaría más efectiva para una estructura de estas características, desde interceptores convencionales hasta soluciones de guerra electrónica capaces de neutralizar aeronaves a distancia.
Entre medidas cinéticas y electrónicas
Las fuentes señalan que se baraja una combinación de medios cinéticos, como drones y sistemas de intercepción directa, con otros no cinéticos, como inhibidores o sistemas de interferencia. El objetivo sería complementar las capacidades defensivas frente a amenazas de distinta magnitud y procedencia.
Por ahora, se trata de una propuesta preliminar en estudio, que refleja las lecciones aprendidas de la experiencia ucraniana en el conflicto con Rusia. La idea de un “muro antidrones” busca reforzar la seguridad del frente oriental de la UE, pero también plantea interrogantes sobre su sostenibilidad, la escala de inversión necesaria y la cooperación militar entre Estados miembros.