Religión

"Prohibido el burka o el niqab en lugares públicos": el proyecto de ley de Meloni que siembra la polémica en Italia

El partido de Giorgia Meloni ha presentado un proyecto legal en Cortes sobre el "velo integral"

El Consejo de Estado francés, contrario a la prohibición total del burka
El Consejo de Estado francés, contrario a la prohibición total del burkalarazon

Un proyecto de ley presentado por el partido de la primera ministra Giorgia Meloni, Hermanos de Italia, está sembrando la polémica en el país transalpino. El texto, presentado formalmente por los diputados Sara Kelany, Galeazzo Bignami y Francesco Filini en la Cámara de los Diputados, busca prohibir "el velo integral" en lugares públicos como universidades, colegios, oficinas y lugares públicos.

Si bien no ha trascendido qué definición hace el proyecto legal de "velo integral", es fácil asumir que se referirá a velos islámicos que cubren el rostro de las mujeres, como es el caso del burka o del niqab. De aprobarse la ley, vestir una de esas prendas en esos espacios conllevaría multas de hasta 3.000 euros. Pero no es la única medida que contempla la iniciativa.

El texto que rubrica el partido Hermanos de Italia también pretende regular la financiación de las mezquitas en Italia e impondrá mayores penas por inducir al matrimonio mediante engaño. Además, cualquiera que obligue a una persona a someterse a una prueba de virginidad, con la excepción de un facultativo, podría enfrentarse a cinco años de prisión, según detalla la prensa italiana.

Pero la polémica no solo se está dando por las medidas en sí, sino porque la iniciativa política se enmarca en una carrera entre el partido de Giorgia Meloni y el partido del también ministro del actual Gobierno italiano, Matteo Salvini: la Liga ya presentó una iniciativa similar meses atrás.

El precedente político

Lo cierto es que en enero la Liga ya presentó una proposición legal en términos similares. La firmó el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara baja italiana, el diputado de La Liga Igor Iezzi. El texto, en este caso, planteaba multas de hasta 30.000 euros y dos años de cárcel para quienes forzara a ocultar el rostro a una mujer "mediante violencia, amenazas o abusos".

En aquella ocasión, el proyecto legal contemplaba excepciones, como la posibilidad de llevar prendas que tapen el rostro en lugares de culto y en contextos relacionados con la salud, con el tráfico vial (un motorista con casco, sin ir más lejos) o en competiciones deportivas.

La cuestión es que aquella proposición de la Liga simplemente endurecía los términos de una ley italiana de 1975 que en realidad ya prohíbe portar prendas "salvo razones justificadas" que tapen el rostro en espacios públicos. En síntesis, las medidas ya existen en el país que dirige Meloni.

Un líder de la comunidad musulmana en Italia, el presidente de la asociación cultural Zayd Ibn Thabit, Massimo Abdallah Cozzolino, reconoció en declaraciones al periódico LaPresse que prohibir el velo integral "no es lo mismo que prohibir el velo" y que se puede entender "por la lógica de la seguridad", aunque "ya existe legislación" con lo que ignora "cuál es la utilidad real de esta propuesta".

En Lombardía se aprobó ya en 2015 una moción en términos similares, pero nunca se aplicó, a pesar de que se llegaron a diseñar carteles que prohibían el acceso a edificios públicos en los que se apreciaba la iconografía de una persona portando un velo integral y de otra portando un pasamontañas.

La Liga de Salvini trató de exigir en la región lombarda que esta moción ya aprobada en su momento comenzara a aplicarse, pero el Partido Demócrata italiano solicitó en la cámara regional que el voto fuese secreto y la organización política de extrema derecha no logró ganar aquella votación.