Un quinto amigo de los jóvenes galeses que aparecieron muertos decidió no ir en el último momento

Lucy, una trabajadora de un supermercado cerca de Harlech, un pequeño pueblo de Gales, recuerda perfectamente al grupo de cuatro jóvenes que paró el pasado domingo a medio día para comprar carbón y pasta. “Estaban felices, riéndose y bromeando”. Tras la parada de rigor, se metieron en un Ford Fiesta y pusieron rumbo a una carretera de montaña para el parque natural de Snowdonia.

Fue la última vez que se vio con vida a Jevon Hirst, de 16 años, Harvey Owen, de 17, Hugo Morris, de 18 y Wilf Fitchett, de 17. Sus teléfonos dejaron de mandar y recibir mensajes ese mismo día. Sus familiares, alarmados, llamaron a la Policía. Y tras una intensa búsqueda, los cuerpos fueron encontrados finalmente el martes dentro del coche, que estaba boca abajo y parcialmente sumergido en el agua.

Lo que iba a ser un camping en un paraje idílico se convirtió en una tragedia que ha impactado a Reino Unido y ha llegado hasta Westminster. El primer ministro, Rishi Sunak , rindió homenaje a los jóvenes y el líder laborista, Keir Starmer , lamentó "lo difícil que es imaginar" lo que supone esta pérdida para las familias. “Estoy seguro de que hablo en nombre de todos en la Cámara al decir que nuestros corazones están con las familias y amigos de los cuatro jóvenes de Shrewsbury que trágicamente perdieron la vida esta semana", matizó.

Un amigo de Hugo, al que conoció trabajando en el Pret a Manger de Shrewsbury, iba a apuntarse también a la aventura, pero en el último momento cambió sus planes. Mimi Ropotka, que trabajaba con los dos chicos, asegura a la prensa local que “no puede creer que haya perdido a su amigo de manera tan repentina y trágica”. El superviviente se encuentra en una situación emocional muy delicada.

Durante dos días se estableció una amplia operación de búsqueda para la que se desplegaron helicópteros de rescate en la montaña así como numerosos efectos de policía y guardacostas. La única pista que tenían era un vídeo difundido a través de Twitter en el que uno de los adolescentes arrastraba una tienda de campaña hasta el interior del vehículo.

Los cuatro adolescentes estudiaban en el Shrewsbury Colleges Group, que recientemente había perdido a otros dos alumnos. Uno en un accidente de moto y otro en un suicidio, por lo que los profesores están devastados. El centro emitió un comunicado lamentando la "conmovedora" noticia y agradeciendo a los servicios de emergencia y equipos de rescate de montaña, así como a los ciudadanos que participaron en la búsqueda.

El martes, la policía acordonó más de seis kilómetros de la carretera A4085, entre Garreg y Aberglaslyn Bridge, la zona donde se encontró el coche.

Un residente de la zona asegura que en el lugar del siniestro "no hay señales en la carretera, nada". "Hay una curva cerrada, la carretera se estrecha. Había muchas hojas en esa curva. Anteriormente ha habido uno o dos accidentes en ese lugar", reveló.

La investigación continúa, pero la policía teme que el horrible accidente ocurriese poco después de que los jóvenes abandonaran la casa de uno de sus abuelos. Crystal Owen, la madre de Harvey, reveló que la última vez que los jóvenes usaron sus teléfonos fue alrededor del mediodía del domingo y que pensó que su hijo estaba en casa del abuelo de un amigo. “Si hubiera sabido adónde iban no lo habría dejado por las condiciones climáticas”, dijo. De hecho, la lluvia y el fuerte viento dificultaron la operación de rescate del misterioso accidente que ha conmovido a todo el país.