Guerra en Ucrania

Rusia indulta a un hombre que decapitó a su pareja por combatir en Ucrania

Viacheslav Samoilov fue condenado a más de nueve años de cárcel por un crimen del que solo ha cumplido tres meses

Soldados rusos en Volgograd, Rusia, el mes pasado
Soldados rusos en Volgograd, Rusia, el mes pasadoAlexandr KulikovAgencia AP

Olga Shlamina desapareció el 20 de marzo de 2021. Los usuarios se volcaron a través de las redes sociales para dar con el paradero de la mujer de 33 años, natural de la región rusa de Arcángel. No hubo suerte. Dieron con sus restos mortales pasados cinco días en un bosque de la zona. Primero hallaron su cuerpo, seccionado, que presentaba además varios hematomas; unos días después encontraron su cabeza. Había sido decapitada por su pareja, Viacheslav Samoilov, quien reconoció haber golpeado a Shlamina y dijo que «podría haberla matado».

Acabó siendo condenado a nueve años y siete meses de prisión por un homicidio que, según la justicia rusa, cometió después de haberla golpeado y estrangulado. Los fiscales del caso acusaron a Samoilov de desmembrar el cadáver para encubrir el crimen. Había quemado incluso su ropa y otras pertenencias. Samoilov se declaró parcialmente culpable, pero testificó ante el tribunal que el asesinato no había sido premeditado.

Permaneció en prisión los tres primeros meses, hasta ser llamado a filas por el Ejército para combatir en la denominada «operación militar especial» en Ucrania, en el marco de la campaña de movilización puesta en marcha por el Kremlin en primavera del curso pasado para sostener la sangría de bajas. A los pocos meses, Samoilov había vuelto a Rusia con un indulto, denunció la madre de Olga Shlamina en declaraciones al portal 29.RU. No es un caso aislado.

La madre de Samoilov, también residente en la región de Arcángel, confirmó que su hijo había salido de prisión. «Ha sido liberado e indultado, es un nuevo comienzo», trasladó a este mismo medio, antes de puntualizar que Samoilov estaba «limpio ante Dios». La mujer se lamentó, sin embargo, de que su hijo hubiera resultado herido en combate: «Eso es lo que ha pasado. Nadie está protegido de esto, ¿verdad? Ahora recibirá el tratamiento, y su vida continuará».