Siria

Una caravana humanitaria se salta la prohibición de Asad

El régimen rechaza la entrada de ayuda en Alepo que no esté coordinada con la ONU

La Razón
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Las agencias humanitarias esperaban ayer en la frontera con Turquía para poder llevar la más que necesaria ayuda a las ciudades sitiadas de Siria. A pesar de que el alto el fuego entró en vigor la tarde del lunes, la situación de seguridad es la mayor preocupación para Naciones Unidas. Si el alto el fuego se mantiene, las agencias de la ONU podrán hacer llegar la ayuda de emergencia. «Estamos esperando que el cese de hostilidades sea realmente efectivo. Necesitamos paz para que los camiones puedan empezar a moverse y los humanitarios no estén en peligro mortal», dijo en una rueda de prensa Jens Laerke, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.

El Gobierno sirio rechazó ayer la entrada de ayuda humanitaria en Alepo que no esté coordinada previamente con Damasco y Naciones Unidas, especialmente la que llegue de Turquía. No obstante, una caravana humanitaria turca de 20 camiones cruzó a Siria en dirección a Alepo, informaron medios locales turcos. El convoy, que transportaba alimentos, ropa y juguetes para los habitantes del norte de Alepo, cruzó por el paso fronterizo cerca de la localidad de Reyhanli, en la provincia de Hatay, en el sur de Turquía. La ONU obtuvo la aprobación del régimen el pasado 6 de septiembre para entregar ayuda a cerca de un millón de personas este mes, incluyendo las áreas rebeldes del este de Alepo, que han sido cercadas por las fuerzas gubernamentales desde principios de julio. Inicialmente, los más de 250.000 civiles atrapados en el Alepo oriental recibirán suministros de alimentos en camiones que cruzan desde la frontera con Turquía. Las otras ciudades incluidas en el acuerdo son Moadamiyat al-Sham Madaya, Zabadani, Foua y Kefraya.