Guardia Civil

La Guardia Civil reacciona al mensaje de Marlaska: «No hay alternativas efectivas a las concertinas»

El Instituto Armado duda de la declaración del ministro del Interior en el Congreso, que promete “medios más modernos” en la frontera de Ceuta

Varios inmigrantes esperan su entrada al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta, tras conseguir saltar la valla fronteriza / Efe
Varios inmigrantes esperan su entrada al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta, tras conseguir saltar la valla fronteriza / Efelarazon

El Instituto Armado duda de la declaración del ministro del Interior en el Congreso, que promete “medios más modernos” en la frontera de Ceuta

Dice Fernando Grande-Marlaska que la expulsión de los 119 migrantes que asaltaron Ceuta el pasado 22 de agosto es un “mensaje claro para las mafias”. También que “la seguridad y la protección” de las fronteras está por encima de la inmigración violenta y que la humanidad nunca puede ser el equivalente a “permisividad”. Lo que en ningún momento aclara es cómo todos estos enunciados van a tener consistencia en un momento de efecto llamada tras la acogida del Aquarius y tras el anuncio de acabar con las concertinas en los perímetros. Para el ministro del Interior, entrar “de forma ordenada” es “posible y deseable”, sin embargo los últimos datos de entradas a las dos ciudades autónomas demuestran que esta idea está lejos de asentarse.

Su intención, según adelantó ayer durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados, es reforzar los controles fronterizos e impulsar “medios más modernos” y “no lesivos”. Por el momento, se desconoce cual será la alternativa a las tan discutidas concertinas que instaló el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2005. “Vivimos con mucha incertidumbre”, aseguran a LA RAZÓN fuentes de la Guardia Civil en Ceuta. “A día de hoy, no hay alternativas efectivas a las concertinas que permitan retrasar la entrada de los subsaharianos. No hablo de impedir su acceso, sino de tiempo para actuar. Es cierto que es un medio lesivo, pero también lo es el mar y siguen existiendo las pateras”.

El pasado 26 de julio tuvo lugar uno de los saltos más violentos de los que recuerdan los agentes de la Guardia Civil: 602 personas accedían al territorio español escudados en cal viva, excrementos y piedras. Como consecuencia, 132 de ellos requirieron asistencia sanitaria, pero también 22 agentes tuvieron que ser atendidos tras los golpes recibidos. Tras éste, el pasado 22 agosto, otros 119 volvieron a repetir el mismo “modus operandi”. Sin embargo, no corrieron la misma suerte. En poco de más de 24 horas, se procedió a su expulsión a Marruecos en virtud de un acuerdo de 1992 firmado entre Madrid y Rabat, que contempla la devolución en menos de 10 días de los ciudadanos de terceros países que entren ilegalmente en España desde Marruecos. “No ha habido ningún pago”, señaló Grande-Marlaska, a cambio de readmitir a este centenar de personas.

Además, para justificar este procedimiento, alegó que las condiciones de “absoluta violencia” de ambas entradas. “La humanidad y la solidaridad no pueden convenir con las entradas violentas”, señaló, para después pedir que “no se caiga en justificaciones” porque “la mayoría” de las personas que accede a España “son pacíficas”. “No vamos a beneficiar al que es violento, sino al que no lo es”. Algo que despista tanto como confunde a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que siguen a pie de perímetro. “No nos fiamos de las políticas del Gobierno. Un día dicen que todos los inmigrantes serán bienvenidos, otro que se acabó lo que se daba, expulsando a todos los que entren. Está bien que se tomen decisiones, pero ¿qué pasará cuándo le lluevan nuevas críticas? Hoy es blanco y mañana negro”, aseguran desde la ciudad autónoma. “Además, no hay que perder de vista que el simple hecho de entrar por la fuerza en un terreno que está vallado ya es de por sí violencia”.

Prisión para los cabecillas del asalto

El titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Ceuta ordenó ayer el ingreso en prisión de los dos presuntos cabecillas del salto en grupo del perímetro de la ciudad norteafricana que el pasado 26 de julio se saldó con la entrada en territorio español de 602 indocumentados. Además, el instructor del procedimiento, que permanece bajo secreto de sumario, ordenó la puesta en libertad con cargos de otros siete detenidos como investigados por la comisión de presuntos delitos de organización criminal, atentado y lesiones.

Otro de los arrestados este martes a primera hora de la mañana en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) quedó exculpado tras no ser identificado en las cinco ruedas de reconocimiento que, con la participación de dos imputados junto a otras cuatro personas en cada una, se han celebrado en sede judicial.