Inglaterra

La Reina Isabel II lanza una ginebra para sanear las finanzas de la corte

Una bebida para evitar despidos: la decisión de producir una ginebra oficial se crea después de que la pandemia de Covid-19 redujera los ingresos de la familia real inglesa.

La ginebra de la Reina Isabel II
La ginebra de la Reina Isabel IIRoyal Collection TrustRoyal Collection Trust

Las arcas de la Casa Real de Inglaterra se han visto afectadas por la crisis actual provocada por la pandemia. Una de las soluciones previstas para detener el daño ha sido jugar con una de las grandes pasiones de la Reina Isabel II, la ginebra. Según cuenta la leyenda, su Majestad, aún con 94 años, nunca ha dejado de beber al menos una vez al día una copa de Dubonnet, un cóctel elaborado a base de ginebra.

Según parece, la fundación Royal Collection Trust ha tenido que solicitar recientemente un préstamo de más de 24 millones y recurrir al despido voluntario de 650 personas. Durante el cierre debido a la emergencia del coronavirus el número de visitantes a las propiedades inmobiliarias se ha visto reducido a cero. Se estima que las pérdidas de ingresos para la Casa Real serán de unos 64 millones de libras.

La reapertura a los visitantes, programada para el 23 de julio, puede no ser suficiente para evitar docenas de despidos entre el personal de la realeza de Inglaterra, porque tal y como ha manifestado el chambelán Lord Peel, las posesiones reales pueden no estar “totalmente operativas hasta 2021 y aún así, el cambio de la aptitud para viajar significará una probable disminución en el número de visitantes durante varios años”.

Y como no hay nada más británico que el gin, este ha sido el alcohólico remedio que ha lanzado al mercado la marca Royal Family para combatir la sequía de las arcas reales. La esperanza ahora es que este nuevo producto que se colocará en el mercado, aprovechando el espíritu patriótico, elevará las finanzas de la Reina.

Esta nueva ginebra se puede comprar físicamente y en la web de Royal Collection Trust a un precio de 40 libras (unos 45 euros) y de momento la venta está restringida al Reino Unido.

Tal y como se lee en la descripción del producto «El limón, la verbena, las bayas de espino y las hojas de morera se encuentran entre las 12 plantas cosechadas a mano para preparar la ginebra en los jardines del Palacio de Buckingham, que se extienden por más de 16 hectáreas y representan el hábitat de 30 especies de aves y más de 250 especies de flores silvestres ».

Además de ser la bebida de los próximos actos oficiales del Palacio de Buckingham, desde la web real dan una pequeña receta para apreciarla en su totalidad: el «método recomendado para servirlo es verter una parte de ginebra en un vaso lleno de hielo, antes de agregar agua tónica y decorar con una rodaja de limón».

Los expertos se dividen

Precisamente en relación con el sabor de la nueva ginebra real, los expertos están divididos. Para el Times es “muy delicado, muy floral, no débil pero elegante y no pica la lengua, a pesar de los 42 grados alcohólicos”. Una ginebra para entendidos, en definitiva. Sin embargo, para el Telegraph, la ginebra no pasaría ningún examen de calidad: demasiadas hierbas y cítricos y poco calor de la ginebra real. De hecho, aconsejan beberla simplemente para cumplir “con el deber patriótico”.

Los otros usos de la ginebra

La modista de la Reina Isabel Angela Kelly es la única persona de su círculo cercano que tiene permiso para revelar detalles del día a día de la monarca inglesa. Kelly reveló en su libro El otro lado de la moneda: la reina, la cómoda y el armario que un poco de ginebra y agua es el truco perfecto para devolver el brillo a los diamantes del joyero real.

Cuando el día 23 vuelvan a abrirse las puertas de los palacios reales, las botellas de ginebra también se exhibirán en las tiendas de la Royal Collection Shop, ampliando así la oferta de merchandaising real: se pueden comprar teteras, vino, galletas de mantequilla, chocolate, té y hasta whisky del palacio Holyroodhouse).

Los beneficios que se esperan conseguir de esta ginebra con su delicada botella azulada con flores se destinarán a la fundación real que supervisa y gestiona las exhibiciones de arte de la Colección Real y todas las aperturas de las residencias oficiales de la Reina para el público en general, entre ellas el Castillo de Windsor, el Palacio de Holyroodhouse en Edimburgo y el Royal Mews de Buckingham.