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Labios

Labios mordidos, el 'trend' que lo está petando y el secreto para conseguirlo

La técnica de maquillaje que imita unos labios ruborizados llega para conquistar el verano: descubre el secreto detrás de esta tendencia viral y cómo conseguirla

Kendall Jenner con la técnica de labios que arrasa en TikTok @KENDALLJENNER

El verano es, por excelencia, la estación que invita a aligerar todo, desde la ropa hasta el maquillaje. Buscamos esa sensación de frescura, looks que nos hagan sentir cómodas y radiantes bajo el sol, priorizando la naturalidad sobre los acabados pesados o elaborados.

Esto se ve potenciado por distintas influencias estéticas que circulan globalmente. La belleza coreana, por ejemplo, ha marcado un rumbo claro hacia pieles luminosas y maquillajes que realzan los rasgos sin transformarlos drásticamente.

En este contexto de "menos es más", los detalles adquieren una relevancia especial. Un toque de color sutil aquí, un punto de luz allá... Se trata de crear la ilusión de una belleza que parece haber surgido sin apenas esfuerzo, y para los labios, esto se traduce en una técnica que es tan sencilla como favorecedora.

¿Qué son y cómo conseguir los labios mordidos?

Olvídate de los contornos nítidos y los labiales aplicados con precisión milimétrica. La tendencia de los "labios mordidos", o bitten lips, propone un acabado degradado donde la mayor intensidad del color se sitúa en el centro de los labios, difuminándose suavemente hacia los bordes, según apuntan desde Trendies. El objetivo es simular ese enrojecimiento sutil que aparece tras un suave mordisco o un beso, alineándose perfectamente con la estética del clean look y la influencia de la belleza asiática.

Lograr este efecto deseado es mucho más sencillo de lo que podrías pensar. El primer paso para conseguirlos es asegurarse de que tus labios estén bien preparados, lo que significa que deben estar hidratados y exfoliados para que el color se asiente de manera uniforme. Una vez listos, el truco reside en aplicar el producto de color (un tinte labial o un labial líquido en tonos rojizos, rosados o coral) solo en el centro de la boca. Luego, con la yema del dedo, una esponja pequeña o un pincel, difuminarlo suavemente hacia afuera.

La magia de los labios mordidos reside en su adaptabilidad y la frescura que aportan. Son perfectos para el día a día, combinan con cualquier estilo y son una gran opción si buscas llevar color sin que parezca que llevas un labial tradicionalmente aplicado. Además, permiten jugar con acabados, desde mate hasta un toque de brillo central para un efecto más jugoso.