Alarma en Lepe por el incendio de un asentamiento chabolista

Las llamaradas y el humo alertaron a los vecinos y visitantes de un municipio entregado al plácido veraneo en la playa. En torno a las 6:00 horas de ayer la Policía Local de Lepe (Huelva) recibió el primer aviso de un incendio en el asentamiento chabolista situado detrás del cementerio. La virulencia del fuego y el sonido de varias explosiones, provocadas por bombonas de butano, auguraban una tragedia, aunque finalmente el suceso tan sólo fue un susto. Un total de 30 chabolas fueron arrasadas por el fuego en un núcleo en el que llegan a convivir casi 500 inmigrantes durante la recogida de la fresa, entre febrero y mayo. Ayer no llegaban al medio centenar –ninguno resultó herido– y los cobertizos de cartón y plástico afectados no estaban habitados. De hecho, cuando llegaron los primeros efectivos había, según fuentes municipales, unas cinco o seis personas recogiendo enseres. A las 7:00 horas ya habían sacado sus pertenencias y en torno a las 8:00 ya habían sido reubicados junto a otros compatriotas. Poco después los bomberos dieron por extinguido el incendio. Se trata de un suceso habitual en la zona, con similares consecuencias.

No obstante, en esta ocasión las llamas se propagaron con mucha rapidez debido al efecto del viento. Además, se ha creado una nueva zona de chabolas en el entorno, lo que propició que se extendiera el fuego. Según las mismas fuentes, todo indica que una bombona fue el origen, un «accidente fortuito» que generó inquietud entre la población.

Según el alcalde, Juan Manuel González, el fuego «fue sofocado inmediatamente, pero se produjeron algunos rebrotes por las altas temperaturas». «El incendio ha afectado a una parte de las chabolas, a la más alejada, en un asentamiento donde afortunadamente ahora viven muy pocas personas», señaló.

En las labores de extinción participaron efectivos del Consorcio de Bomberos de Huelva, concretamente de los parques de Ayamonte y Punta Umbría. También estuvieron presentes agentes de la Guardia Civil y la Policía Local.

Precisamente, un policía local ha relatado en Facebook su experiencia. Junto a un compañero fueron los primeros en llegar, por lo que comenzaron a despertar a las personas que estaban durmiendo. «Fuimos golpeando puerta a puerta de cada chabola y seguimos corriendo en dirección contraria, acercándonos cada vez más al fuego». Según su relato, «sientes un calor abrasador en la cara, jamás podía imaginar que el fuego se podía propagar a una velocidad tan terrorífica».

El agente asegura que el estallido de una bombona «provocó una bola de fuego de más de 20 metros de altura». Las llamas estaban «descontroladas» cuando llegaron los bomberos.

Un problema latente

El alojamiento de los inmigrantes dedicados a la recogida de la fresa es un problema que sigue latente en Lepe. Sin embargo, el Ayuntamiento ha puesto en marcha iniciativas encaminadas a su erradicación. Una de ellas es la creación de una bolsa de viviendas vacías, contando con beneficios fiscales para los propietarios. También se busca proporcionar a los temporeros las condiciones básicas para trabajar con dignidad.