«A algunos, cuando se le acaban las ideas, miran al Valle de los Caídos o a los curas»

VALLADOLID- «A algunos, cuando se les acaban las ideas, plantean un modelo federal asimétrico, federal social o miran al Valle de los Caídos y se acuerdan de los curas», con el fin de plantear la revisión de los acuerdos Estado-Santa Sede. De esta manera se expresaba el consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta de Castilla y León, José Antonio de Santiago-Juárez, en clara alusión al Partido Socialista, ante las propuestas de «reformar la Constitución para no se sabe qué». Y es que, apuntó, «los ciudadanos están a otra cosa», esto es, salir de la crisis, que se cree empleo o que los servicios públicos se presten con calidad.

De Santiago-Juárez consideró, no obstante, que «no hay que tener miedo» a variar artículos de la Carta Magna, si bien, «hay que saber cuáles y para qué». Y es que, agregó, en este momento, «no se da el clima adecuado para reformarla», dado que son necesarias mayorías cualificadas para retocar ciertos artículos.

El consejero respondió también a voces críticas que apuntan al texto constitucional como poco claro en cuanto a la definición del modelo territorial en su título octavo, y señaló que responde a «una ambigüedad meditada y medida», ya que en algunos territorios existían las autonomías y en otros estaban gestándose.

De manera que, dijo, «se buscó que todos se sintieran cómodos, que fuera una herramienta jurídica para convivir en paz y libertad, y para ello se requería cierta ambigüedad».

Al respecto, consideró que la Carta Magna de 1978, de cuya aprobación hoy mismo se cumplen 35 años, ha resultado «magnífica», no obstante apoyó la posibilidad de que se concreten las funciones del Senado como órgano de decisión territorial, así como la vinculación entre los parlamentos autonómicos y la Cámara Alta.

Más críticas al PSOE

En otro orden de cosas, el portavoz de la Junta recriminó al PSOE de Castilla y León que no haya valorado positivamente los buenos datos económicos y educativos conocidos esta semana, a partir de la Contabilidad correspondiente al tercer trimestre de este año y el último Informe PISA.

«Cada vez que ocurre algo positivo, les deprime, porque esto va en su ADN», manifestó con ironía el consejero, quien añadió que «es tristísimo que no feliciten a profesores, padres y alumnos».

El consejero de la Presidencia y portavoz aseguró que «en Castilla y León educamos bien y está contrastado», porque «secuencialmente en los últimos años se nos ha colocado en primer lugar, y eso que es muy difícil mantenerse en esa posición». Un hecho que, añadió, «se debe al esfuerzo de profesores, padres, alumnos y al modelo educativo de la Junta de Castilla y León».

Giro a la Agenda de Población

Con respecto a los últimos datos sobre evolución demográfica presentados por el Instituto Nacional de Estadística, según los cuales Castilla y León registra una tasa negativa de -5.116 habitantes, a partir del agregado entre nacimientos y decesos, De Santiago-Juárez avanzó una «revisión formal» de la Agenda de Población que «verá la luz en breve» en el Consejo de Población, que se reúne una vez al año. El objetivo de este giro no es otro que «incidir en nuevas medidas y suprimir las que no se utilicen o las que no hemos sabido desarrollar».

Asimismo, el consejero incidió en la alianza con Aragón, Galicia y Asturias para luchar en Bruselas de cara a que, en el periodo 2014-2020 se tenga en cuenta a las regiones con un peor dinamismo demográfico en sus Presupuestos comunitarios.

Mejor relación con el Ministerio de Industria

El consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, consideró que las relaciones con el Ministerio de Industria, Energía y Turismo son «fluidas». Así se expresaba al ser preguntado sobre la reunión que mantendrán, la próxima semana, el consejero de Economía, Tomás Villanueva, y el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, con la minería como telón de fondo. Según apuntó, «han cambiado las cosas», porque hay un acuerdo entre el sector y el Gobierno para renovar el Plan del Carbón hasta 2018, que «si se puede mejorar, se mejorará».