Más de 66.000 profesionales del primer sector se beneficiarán esta semana de 65 millones de la PAC

Al menos 66.000 agricultores y ganaderos de Castilla y León percibirán esta semana su parte correspondiente de los 65 millones de la Política Agraria Común (PAC) pendientes del saldo de 2018 que abonará la Junta.

Esta cuantía se corresponde al 5 por ciento del pago básico y verde y al diez por ciento de las actividades asociadas a superficies. Con ello, se alcanzará una cifra cercana de pago de 900 millones correspondientes a la PAC del pasado ejercicio, «el mayor importe de España en términos porcentuales de ejecución», tal y como reveló el director general de Política Agraria Comunitaria del Ejecutivo autonómico, Juan Pedro Medina, quien matizó que el pago pendiente a las actividades ganaderas asociadas quedará aún pendiente «porque no está fijo el importe final».

Medina, quien visitó Salamanca con motivo de la celebración de la Asamblea General de Asaja, aprovechó la cita para apostar por la realización de un Plan Estratégico Nacional ante las negociaciones en Bruselas de la nueva PAC y lamentó el «parón» que sufrirán las conversaciones con la convocatoria de las elecciones autonómicas.

Allí, junto a los presidentes de Asaja nacional, Pedro Barato, y autonómico, Donaciano Dujo, animó a la creación de un planteamiento conjunto porque, en su opinión, «no hay tanta diferencia entre un territorio y otro».

A su juicio, ese plan con el que «atraer jóvenes al campo y alcanzar el objetivo de la rentabilidad» debe ser «cómodo, sencillo, común y qye se entienda, sin pensar tanto en la letra pequeña a la que hemos estado mucho tiempo sometidos en la PAC».

«Ahora tenemos la ocasión de hacer un Plan a la medida de lo que los agricultores y ganaderos de España y Castilla y León necesiten, sin escudarnos en Europa, por lo que vamos a hacerlo bien», demandó Medina, quien contó con el apoyo de Barato y Dujo, quienes calificaron de «inconcebible» que se pretenda rebajar el presupuesto de estas ayudas.

Asimismo, denunciaron la incertidumbre que vivirán los profesionales del campo durante estos próximos meses por las elecciones y reclamaron «políticas internacionales con presupuestos ligados a la producción que garanticen el futuro».