Rusia

Alexiévich: «Rusia no estaba preparada para ser socialdemócrata»

La ganadora del Premio Nobel ofreció una multitudinaria rueda de Prensa en el CCCB

La última ganadora del Premio Nobel de Literatura, Svetlana Alexiévich, ayer, en el CCCB
La última ganadora del Premio Nobel de Literatura, Svetlana Alexiévich, ayer, en el CCCBlarazon

La periodista bielorrusa Svetlana Alexiévich ha vuelto al Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) donde ya estuvo como ponente en el simposio «Traumas urbanos». Pero ahora, desde el pasado año, es también la última galardonada con el Premio Nobel de Literatura. Todo ello hace que ayer hubiera mucha expectación en el auditorio del CCCB para escucharla en una multitudinaria rueda de Prensa. Este encuentro con los medios ha sido previo a su participación hoy en Literal, la feria de ideas y libros radicales, y de su participación el próximo miércoles en una conferencia en el CCCB.

La autora de títulos como «Voces de Chernóbil», «La guerra no tiene rostro de mujer» o «Los muchachos de zinc» inició su intervención asegurando que «soy periodista. Mi padre antes de la guerra estudió para serlo. Así que desde pequeña supe que iba a ser periodista porque quería llegar a ser como mi padre». A ello se le sumó el hecho de «querer expresar las voces de las mujeres de las mujeres que vivían en los pueblos, las que hablaban sobre la guerra». Aconsejando que «hay que aprender de la vida», la Premio Nobel confesó que «no solamente busco en el periodismo sino también en el arte, en la literatura, mirando en las caras de la gente. Finalmente todo esto se integra en lo que haces».

Método de trabajo

Alexiévich explicó su método de trabajo para conseguir los testimonios que luego podemos encontrar en algunos de sus libros, como «El fin del “Homo sovieticus”»: «No llevo preguntas. Me hago amiga de la persona». De esta manera los testimonios fluyen y permiten a la autora bielorrusa historias que habían quedado, como dijo ella, en el cofre de la memoria, cerrado con llave.

La periodista también quiso hablar de la situación que se vive en Rusia. «Yo vengo del tiempo de la perestroika. Soy de aquella generación que negaba el comunismo, una idea bonita que no se supo realizar. En los años 90 reinaba una idea romántica de que marchando los comunistas vendría la libertad. Ahora resulta que debemos vivir de las ratas que surgieron de allí. Vino la libertad y nadie sabía lo que era. Este poder fue cogido por ladrones, por aquellos que se repartieron las riquezas del país. Nosotros no conocías nuestro pueblo. Vivíamos en un mundo inventado y lo idealizábamos», aseguró.

Alexiévich subrayó que Rusia «no estaba preparada para construir una sociedad socialdemócrata. Surgió en el pueblo el sentimiento de ser engañado». Por este motivo, la Premio Nobel ha comprobado que «tenemos una situación muy rara en el país donde no se dice capitalimo sino mercado. Los oligarcas quieren volver al poder para recuperar aquello robado».

La tragedia vivida en la central nuclear de Chernóbil, de la que se acaban de cumplir treinta años, también apareció en esta rueda de Prensa. Según Svetlana Alexiévich, una de las consecuencias de ese accidente, un planteamiento que se volvió a repetir luego en Japón, el hombre «piensa que en su enfrentamiento con la naturaleza tiene posibilidades de ganar, pero no se puede ganar la guerra contra la naturaleza».