«La medida del reciclaje de residuos en Sarrià no tiene ningún sentido»

El Ayuntamiento comenzó ayer la recogida selectiva puerta a puerta en el centro del barrio.

El Ayuntamiento de Barcelona comenzó, ayer por la noche, el sistema de recogida selectiva de residuos puerta a puerta en los domicilios del casco antiguo del barrio de Sarrià. La prueba se enmarca en la Estrategia Residuo Cero Municipal, y teóricamente responde a una demanda de l’Associació de Veïns de Sarrià, entre otras entidades. Todo vino precedido por una intensa campaña de comunicación.

El modelo se basa en que los vecinos deben dejar las bolsas –repartidas con anterioridad– de residuos separados en las puertas de sus domicilios entre las 20 y las 22.00 horas, y los servicios de limpieza las recogen durante la noche para reciclar los residuos.

Cinco fracciones

Este modelo diferencia cinco fracciones de residuos que los vecinos deben separar. Esto es, los orgánicos, que son los envases de plástico, y la novedad es que se ha incluido a otros tipos de este material, y a algunos residuos de metal; papel y cartón; rechazo, y residuos sanitarios, mientras que el vidrio continuará con el reciclaje tradicional en los contenedores verdes.

El problema es que esta iniciativa municipal parece no ser del agrado de parte de los residentes en la zona. Una vecina explicó a este diario que «todo esto no tiene ningún sentido», y se refirió a la citada hora de recogida de los residuos, que sólo dura dos horas. «Mucha gente puede estar trabajando», lamentó.

Además, señaló otro detalle importante respecto a Sarrià, que es la anchura de las aceras, que, en líneas generales, es bastante reducida, lo que complica la citada recogida de residuos. La misma vecina opina que esta medida «no compagina con la vida de las personas».

Otra vecina, que reside muy cerca de la sede del distrito, señaló a este diario que «el folleto cuesta mucho de entender», ya que «unos días tienes que bajar un tipo de basura, otro día otro tipo, una bolsa para papeles, otra para pañales, no entiendo nada».

La versión del responsable técnico de recogida y limpieza de este distrito, y también de Sants y Les Corts, Martí Arasanz, es bastante diferente. Además de recordar que seguirá el contenedor de vidrio, aseguró que todo responde a una «idea ambiental». El modelo son cuatro días de recogida, que son lunes, miércoles, viernes y domingos, y cada fracción tendrá sus días específicos de recogida, aunque el resto de los días el Consistorio habilitará unas áreas de emergencia en la plaza Artós, la plaza Sant Vicenç y también en el Consell de la Vila, donde se podrán depositar los residuos.

Arasanz destacó que el objetivo de este nuevo sistema es «reciclar el máximo que se pueda» y alcanzar una tasa de reciclaje entre el 60 y el 70 por ciento, ya que actualmente con el sistema de contenedores está en un 36 por ciento aproximadamente.

Además, expresó la necesidad de mejorar el reciclaje de la fracción orgánica, ya que es la que tiene unos índices más bajos, por lo que afirmó que es en la que han puesto «más énfasis» y un mayor presupuesto. Sostuvo que para que funcione es necesario un «cambio de mentalidad», pero se mostró convencido de que puede funcionar, ya que defiende que en muchos municipios llevan años con este modelo y que les funciona. «Lo que hemos hecho es coger las experiencias de otros pueblos, y con ayuda lo hemos aplicado aquí en Sarrià», dijo.