Los médicos piden prohibir un congreso contra los oncólogos

El Colegio de Médicos de Barcelona (Comb) pidió ayer al departamento de Salud que prohíba un acto convocado como «congreso internacional» para mañana en Barcelona por un grupo «pseudocientífico» que cuestiona la información y la labor de los oncólogos.

El Colegio de Médicos de Barcelona (Comb) pidió ayer al departamento de Salud que prohíba un acto convocado como «congreso internacional» para mañana en Barcelona por un grupo «pseudocientífico» que cuestiona la información y la labor de los oncólogos.

El acto en cuestión, que se publicita a través de las redes sociales y que agotó las entradas disponibles, se titula «Un mundo sin cáncer. Lo que tu médico no te está contando» y, según el anuncio, en él participarán como ponentes Josep Pamies, Suzanne Powell, Txumari Alfaro, Andreas Kalcker, los norteamericanos Cocó March y Gastón Cornu-Labat y el mexicano Antonio Jiménez.

El Colegio de Médicos de Barcelona considera que este acto «cuestiona la honestidad de los médicos» porque «pone en duda la información sobre cáncer que facilitan los médicos».

«Formación»

Tras recordar que el médico «es el único profesional con formación, conocimientos y competencia para diagnosticar una enfermedad e indicar el tratamiento más adecuado», el Comb criticó que los organizadores del acto «pongan en duda, de manera explícita, el papel de los médicos a la hora de informar de manera veraz sobre el cáncer a los pacientes y los ciudadanos en general».

El Colegio puso en conocimiento del departamento la convocatoria y se reserva «el derecho a emprender otras acciones que resulten oportunas». Un documento elaborado por el Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña (Ccmc), con la colaboración de la Sociedad Catalano–Balear de Oncología Médica y la Sociedad Catalano–Balear de Cuidados Paliativos alerta del riesgo de que las terapias alternativas y pseudociencias sin evidencia clínica ni científica suponen para la salud, sobre todo cuando se trata de pacientes con cáncer.

Según el Colegio, estas terapias alternativas, habitualmente basadas en productos nutricionales o consumo de plantas, «pueden generar falsas expectativas e impedir que pacientes que son especialmente vulnerables reciban el tratamiento adecuado y más eficaz para su enfermedad o propiciar el abandono del tratamiento prescrito por el médico».

El Comb defendió que «el médico es el único profesional con formación, conocimientos y competencia para diagnosticar una enfermedad e indicar el tratamiento más adecuado, una buena ‘praxis’ médica».